La exintegrante del grupo femenino de pop finalizó la demanda de divorcio que puso al productor Stehphen Belafonte.
Después de anunciar en marzo que se divorciaba tras diez años "por diferencias irreconciliables", la cantante Mel B, ex integrante de las Spice Girls, puso fin de forma amistosa al proceso entablado a su esposo, Stephen Belfonte.
La audiencia para la presentación de alegatos que se iba a realizar en el Tribunal Superior de Los Angeles también suspendida. La decisión de la artista pop y el productor se dio para evitar un proceso mediático.
Según informaron medios especializados, Mel B puso la orden de restricción en marzo contra Belafonte, luego de ser golpeada, obligada a tener tríos con otras mujeres y hostigada con hacer público material íntimo.
Pero ahora la ex pareja llegó a un acuerdo sobre su hija de seis años, Madison, y tienen tres meses para llegar a un arreglo sobre las visitas de Belafonte a su hijastra de 10 años, Angel, cuyo padre es Eddie Murphy, según el abogado de Belafonte, Grace Jamra.
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