La actriz Lori Loughlin, recordada por la serie "Full House", ahora fue inculpada de conspiración para lavar dinero. Sumado al cargo anterior podría ser condenada a hasta 40 años de prisión.
La actriz Lori Loughlin fue inculpada de un nuevo delito en el marco del caso de sobornos pagados por padres ricos para que sus hijos ingresaran a universidades prestigiosas, lo cual aumenta la posibilidad de que reciba una pena de cárcel.
A su inculpación por el crimen de conspiración para cometer fraude bancario se agrega el de conspiración para lavar dinero, indicó el fiscal federal de Massachusetts, Andrew Lelling.
Este segundo delito es pasible de hasta 20 años de cárcel, con lo cual Lori Loughlin (54 años), que se hizo famosa en el rol de la tía Becky en la serie "Full House" (Tres por tres), podría ahora ser condenada a hasta 40 años de prisión.
POSIBLES SENTENCIAS
A diferencia de Felicity Huffman, recordada por su rol en "Desperate Housewives", que también forma parte de los 33 padres inculpados en el caso, Loughlin no se ha declarado culpable hasta ahora.
La declaración de culpabilidad permite evitar un juicio, y en general también reducir la pena del acusado.
En el caso de Felicity Huffman, el despacho del fiscal recomendó una pena de prisión en el rango inferior; es decir, cuatro meses de cárcel como mínimo.
Aunque Lori Loughlin decida declararse culpable, su pena sería posiblemente superior. No solo por el segundo delito del cual acusada sino también por los montos de los sobornos pagados.
Huffman pagó US$ 15.000 a un intermediario para que mejorase el resultado de un examen de admisión de su hija que sería presentado a las universidades, mientras que Loughlin y su esposo, Mossimo Giannulli, son acusados de haber pagado US$ 500.000 para que sus dos hijas fueras aceptadas en la Universidad del Sur de California (USC) como integrantes del equipo de remo.
¿CÓMO FUNCIONÓ EL CASO DE SOBORNOS?
Giannulli también fue inculpado el martes de este segundo delito, al igual que otros 14 padres.
El exjefe de una empresa especializada en la preparación de estudiantes para el examen de admisión a la universidad, William Singer, ideó un esquema para garantizar el ingreso de jóvenes a cambio del pago de sobornos.
La empresa de Singer, que se declaró culpable y colabora con la justicia, recibió unos US$ 25 millones de padres millonarios, deseosos de que sus hijos fueran admitidos en universidades prestigiosas como Yale, Stanford o UCLA, según la fiscalía de Massachusetts. (AFP)
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