A pesar de ser el amplio favorito para ganar esta cita, el cuadro de Jupp Heynckes terminó perdiendo 3-1 a manos del conjunto dirigido por Niko Kovac.
Para no creer. El Bayern Munich no pudo salir victorioso en la final de la Copa de Alemania 2018 y terminó cayendo 3-1 a manos del Eintracht Frankfurt, en lo que fue su sexta derrota oficial de la temporada. El elenco de Niko Kovac, que dirigirá al elenco bávaro a partir de la próxima campaña, pudo contrarrestar las virtudes del plantel rojo para conseguir su primer trofeo desde 1998, cuando ascendieron a la Bundesliga tras ganar la Segunda División.
Más allá de colectivamente hacer un buen planteo para dañar la defensa del conjunto que juega de local en el Allianz Arena y limitar su poderío ofensivo, la escuadra de Frankfurt tuvo en una noche sensacional al delantero croata Ante Rebic, que se iba a encargar de abrir la cuenta en el marcador al minuto 11 tras robar un balón en sálida y definir de buena manera ante la salida de Sven Ulreich luego de un pase de Kevin-Prince Boateng.
Durante la mayoría del compromiso, el Bayern Munich fue amo y dueño del balón pero eso no le fue suficiente para penetrar una defensa muy sólida de las 'Águilas'. Al final, terminaron con un 73% de posesión de pelota. A pesar de irse abajo en el marcador al entretiempo, el club de Jupp Heynckes encontró el empate a los '53 por medio de Robert Lewandowski en lo que parecía ser el inicio del fin para la plantilla de Niko Kovac.
Pero al no poder hallar la forma de convertir el gol que los pusiera arriba en el marcador, el Bayern siguió intentando y el Eintracht sacó provecho del esquema super ofensivo de su rival para encontrar espacios. De esa manera, Rebic marcó el segundo tanto de su elenco a los '82 después de un envío largo de Danny da Costa y, 14 minutos más tarde, Mijat Gacinovic sentenció el cotejo con un tercer gol posterior a un córner donde Ulreich descuidó su arco y subió hacia el área rival con la esperanza de anotar el empate.
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