El delantero peruano no suele escuchar consejos, por muy buenos que parezcan. Hoy sigue vigente en el competitivo fútbol alemán a sus 40 años.
Con Claudio Pizarro no hay puntos medios. O lo admiran por sus logros en el fútbol alemán o lo cuestionan por sus fríos números en la Selección Peruana. Dos caras distintas para un mismo personaje que hoy parece más vigente que nunca en la competitiva Bundesliga a sus 40 años, sumando minutos en el Werder Bremen y marcando goles.
Su vigencia a una edad donde otros jugadores prefieren ejercer como técnicos o alejarse del fútbol se debe a su capacidad para seguir su propia intuición y evitar oír consejos que le piden elegir otra cosa. Lo hizo desde el inicio de su aventura en Europa, hasta hoy que sigue jugando al fútbol con 40 años encima.
Cuando empezó a brillar en el Werder Bremen llegó a su mesa una oferta del poderoso Real Madrid para contratarlo. Tenía 23 años y ya estaba en la órbita de uno de los grandes de Europa. Cuando muchos le recomendaban que acepte la oferta madrileña por lo que significaba el club, el 'Bombardero' optó por seguir en Alemania, pero vistiendo la camiseta del Bayern Múnich. El tiempo se encargó de hacerle ver que tomó la decisión correcta.
Luego vinieron los récords en Alemania, las idas y vueltas en la Selección Peruana, su fugaz paso por el Chelsea hasta que llegó finales de 2015. Claudio Pizarro logró con la 'Blanquirroja' la medalla de bronce en la Copa América, puso fin a su etapa en el Bayern Múnich y el club decidió despedirlo como un auténtico ídolo.
Tenía 37 años y era el momento perfecto para retirarse, se lo decían sus fanáticos y detractores. Aprovechar el único momento en que sus logros a nivel de club y selección coincidían le permitía irse por la puerta grande, pero Claudio Pizarro afirmó su vocación de testarudo.
No hizo caso a los consejos, se siguió vistiendo de corto y desfiló por el Werder Bremen y luego por el Colonia. No le fue como esperaba, las lesiones lo acompañaron, se confirmó que ya no era del gusto de Ricardo Gareca y la Copa del Mundo solo la vio por TV. Entonces desde La Victoria le pedían que se retire en Alianza Lima, el club de sus amores. Otro pedido que decidió desoír.
Y nuevamente el fútbol premió su capacidad para escucharse así mismo y no a otros. Regresó por quinta vez al Werder Bremen y volvió a ser importante pese a sus cuatro décadas. En solo una semana ha marcado tres goles, dos por Bundesliga y una por Copa Alemana. Quizás le lleguen nuevos consejos, pero el 'Bombardero' ya sabe que no debe escucharlos.
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