La medida fue dictada por el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, según anunció el titular de esta cartera, Javier Piqué, durante una inspección.
Ante la difícil situación por la que pasaron las familias afectadas por el aniego de San Juan de Lurigancho, ocurrido el pasado 13 de enero, el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento dispuso que no se emitan recibos de consumo de agua potable correspondiente al mes de enero.
Fue el propio titular del sector, Javier Piqué, quien informó sobre esta medida durante una inspección realizada a la zona afectada. "La disposición está dada. SEDAPAL y SUNASS serán los encargados de la ejecución de dicha medida, y deberán comunicar cuál será el procedimiento", indicó.
Con esta medida se busca beneficiar a todos los pobladores perjudicados por la acumulación de aguas servidas y que no contaron de manera regular con el servicio de agua potable en sus viviendas.
Pruebas finales
Durante la inspección realizada por el ministro, la empresa SEDAPAL anunció que se han realizado pruebas de manejo de aguas residuales, permitiendo garantizar y prevenir cualquier riesgo de nuevo aniego.
Se precisó que desde la madrugada se ha procedido con la apertura de todas las válvulas, lo que permitirá llenar todos los reservorios y redes del distrito de manera más rápida y empezar, en los próximos días, con un abastecimiento del servicio de agua potable al 100% de la población y de forma continua.
El ministro Piqué reiteró el compromiso para que las familias afectadas puedan contar a la brevedad con el líquido elemento.
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