Conductas nocivas y obsesivas por tener un cuerpo perfecto terminan muchas veces convirtiéndose en malos hábitos en las comidas al extremo de atentar contra su vida y su salud.
Las últimas tendencias de la moda, que buscan imponer un patrón de belleza tanto en la mujer como en el varón, son hoy en día la prioridad de muchas personas, sobre todo jóvenes, que buscan lucir un cuerpo delgado y curvilíneo (en el caso de las mujeres), y musculoso y bronceado (si se trata de varones).
Según la Organización Mundial de la Salud, el 5 o 6 por ciento de las enfermedades mentales que sufren los adolescentes son trastornos de la conducta alimentaria, quienes no conformes con su figura se someten a rigurosas dietas y estrictos ejercicios corporales.
El mejor ejemplo es el verano, a lo largo del año durante las estaciones de otoño e invierno las personas no solo han descuidado su alimentación sino que han obviado la actividad física, pero ante la cercanía de las fiestas de fin de año, las temporadas de playa, quieren recuperar la línea sacrificando su alimentación, sometiéndose a cirugías lipoesculturales, y poniendo en riesgo su vida y su salud.
Estas conductas nocivas y obsesivas por tener un cuerpo perfecto, si bien pueden contemplar una alimentación extremadamente sana, terminan convirtiéndose en malos hábitos en las comidas.
Inclusive estas actitudes pueden resultar altamente perjudiciales para la salud y devenir en trastornos alimentarios como ortorexia (preocupación excesiva por comer sano), vigorexia (obsesión por estar musculoso), drunkorexia (obsesión por estar delgado después de haber ingerido alcohol), manorexia (anorexia en el caso de los varones), pregorexia (anorexia nerviosa en gestantes), potomanía (obsesión por beber más de cuatro litros de agua al día), tanorexia (adicción al bronceado), permarexia (recurren a dietas de revistas sin previo control médico); además de las ya conocidas bulimia y anorexia.
Aunque estas enfermedades se caracterizan por sus síntomas físicos debido a las alteraciones en la forma de comer, puede tratarse de un trastorno mental cuya problemática es más profunda que la simple obsesión por estar delgado. En estos casos, la pérdida de peso es tan solo un pretexto, ya que detrás de un trastorno de la alimentación se encuentra siempre una persona que ha perdido la autoestima o que nunca la ha tenido.
Cuidado con las redes sociales. Muchos menores de edad, sin proponérselo, pueden caer en aquellas páginas que promueven la anorexia y la bulimia, donde los adolescentes encuentran trucos para acelerar la pérdida de peso, consejos que no funcionan y que más bien terminan siendo peligrosos para su salud.
La adolescencia es el grupo de mayor riesgo, y se da sobre todo en chicos y chicas entre 15 y 17 años que están en la edad de los cambios físicos y sociales; y que muchas veces al no saber cómo resolver una situación se vuelven inseguros e insatisfechos.
En esa búsqueda de identidad, el aspecto físico es importante y hay ocasiones en que los adolescentes pueden refugiarse en el control de su cuerpo y de su peso (aunque no estén obesos) para estar bien consigo mismos y aceptados por los demás.
Ante la sospecha de que algún familiar pueda ser víctima de estos trastornos alimenticios, debe propiciarse la comunicación inmediata, sin reproches ni reclamos, sino con la mayor predisposición para escuchar por qué llegó a ello y la voluntad de ayudarle a superar ese problema. En ese aspecto, los cambios no pueden ser drásticos, con la ayuda de un profesional especializado habrá de ayudarle poco a poco hasta que pueda recuperar la confianza en sí mismo y comprender el daño que se estaba autoinfligiendo.
Una forma de prevenir estos trastornos alimenticios es propiciando una alimentación sana y balanceada desde la infancia; enseñarles a los jóvenes valores alternativos con respecto a la estética y cómo hacer frente a la presión social. Combatir el perfeccionismo, evitar las comparaciones, y sobre todo mejorar la autoestima.
************************************
Para participar del programa en vivo puedes llamar al 212-7165, 212-4100 y la línea en el interior del país totalmente gratuita el 0800-13140, también lo podrás hacer a través de fb/ConfidenciasRPP
************************************
Si deseas dar un testimonio sobre este caso u otro, puedes escribirnos a confidencias@gruporpp.com.pe
************************************
Confidencias, de lunes a viernes a partir de las 11:30 de la mañana por RPP Noticias (89.7 FM o 730 AM).
***************
Si eres oyente de Confidencias, te invitamos a seguirnos también por el Facebook. Ingresa a Confidencias y marca “Me gusta”.
***************
Producción y redacción de textos: Amelia Villanueva Ramirez
Comparte esta noticia