La esposa del efectivo Andrés Martínez, quien disparó contra la joven, sostuvo que fue una "lamentable confusión", y avaló la versión sobre que los efectivos implicados perseguían delincuentes.
La esposa del efectivo Andrés Martínez, implicado en la muerte de la joven Brigitte Jeremy Acuña el pasado 31 de diciembre, consideró injusto que lo tilden de "asesino", cuando por una "lamentable confusión" realizó el disparó que le quitó la vida a la muchacha de 19 años.
"Es injusto porque salen a tildarlos de asesinos. Ellos salen a cumplir su trabajo. Se expresan de ellos como asesinos y no lo son", dijo en declaraciones a la prensa, al avalar la versión policial sobre que ese día los efectivos perseguían a delincuentes y por eso dispararon.
"No la dejaron morir. Dispararon porque es su trabajo, porque estaban enfrentándose a los delincuentes. No van a dejar de disparar para que los delincuentes los maten", expresó.
Sostuvo que tras una investigación a su esposo, Andrés Martínez, quedará demostrado que "no ha tenido ningún problema" en los casi 30 años de servicio.
"Investiguen toda su trayectoria, todo su trabajo", replicó.
"Se les cruzó (el vehículo en que viajaba Brigitte). Lamentablemente el destino, la fatalidad que a cualquiera le puede suceder. No la llevaron al hospital por una triste confusión", señaló.
"Ya oramos por el alma de la muchacha. Estamos apenados", concluyó.
Cabe recordar que el director de la Policía Nacional, general Raúl Becerra, reveló a los padres de la joven Brigitte Jeremy Acuña la identidad del efectivo policial que le disparó el pasado 31 de diciembre en el distrito de Salamanca, y el arma que utilizó.
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