Joven acusada de la muerte de su madre, Myriam Fefer, señaló que su hermano, Ariel, le hizo mucho daño.
Eva Bracamonte, acusada de ser la autora intelectual del asesinato de su madre, la empresaria Myriam Fefer, señaló que estuvo presa injustamente por tres años en penal Santa Mónica, de Chorrillos.
"Los primeros meses fueron complicados. Tardé un año y medio en acostumbrarme a la cárcel, pero la prisión me salvó la vida, porque hasta antes de ese episosio estaba con una presión muy fuerte, no atinaba nada", refirió Bracamonte desde el domicilio en Barranco, lugar donde cumple su arresto domiciliario.
Indicó que cuando murió su madre tenía 18 años y estuvo un buen tiempo sin saber qué hacer ni cómo reaccionar. "No tenía nada claro, era muy joven e inmadura, recién había llegado de Israel".
Sin embargo, aclaró que cuando reaccionó tomó la decisión de defenderse de todas las acusaciones. "Dije ya basta, hasta aquí nomás. No soy una asesina y no es justo que esté acá (en la cárcel)", recogió el programa Punto Final.
También afirmó que su hermano le hizo mucho daño. "Eso no es fácil de olvidar, Ariel no solo me hizo daño, sino también a "Lili" y su familia".
A su entender, la juventud de Ariel cuando murió su madre lo impulsó a salir a acusarla.
"Tenía 17 años y era un muchacho que quería decir lo que sentía en la televisión. La prensa le dio un espacio exagerado a una persona que pasaba una etapa muy difícil, eso trajo un efecto horroroso para mí", expresó.
LA VOZ DEL PADRE
Por su parte, Marco Bracamonte, padre de Eva y Ariel, dijo que establecerá contacto con su hijo al acabar el proceso.
"Aprendí a tener paciencia y en este caso debo tener doblemente paciencia. Entiendo a Ariel, ha tenido una infancia con problemas. No comparto lo que dice, pero lo entiendo. Sé que podremos estar juntos con una familia cuando acabe todo", afirmó.
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