El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, aseguró que pese a ello no bajará la "guardia ni un minuto", y continuará dando golpes contundentes a las FARC.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, aseguró que por tareas de inteligencia se ha podido determinar que las FARC preparan un plan de ataques para vengar la muerte del jefe militar de esa guerrilla, conocido con el alias del "Mono Jojoy".
El mandatario señaló en entrevista que hoy publica el diario bogotano El Tiempo que en sus primeros 100 días de Gobierno han continuado dando golpes contundentes a las FARC, como la muerte de Víctor Julio Suárez, alias "Mono Jojoy", el pasado 22 de septiembre en un bombardeo de militares colombianos.
"Hemos sabido que la guerrilla prepara un plan para vengar la muerte de "Jojoy" durante este fin de año. Estamos preparados. Por eso no descansaremos hasta que consigamos la paz, por la razón o por la fuerza", dijo.
Santos subrayó que en ese objetivo no bajará la "guardia ni un minuto".
El jefe rebelde murió el pasado 22 de septiembre junto a una decena de guerrilleros en un campamento subterráneo situado en la serranía selvática de La Macarena, en el sur colombiano.
En la acción, conocida como "Operación Sodoma", fueron empleados 30 aviones y 27 helicópteros de las Fuerzas Armadas del país, que arrojaron sobre la base rebelde siete toneladas de explosivos, según lo precisaron entonces las autoridades castrenses del país.
A esta operación se han sucedido otras contra las FARC, como el bombardeo de ayer contra un campamento rebelde en las selvas del sur del país, durante el cual "aparentemente" fue abatido José Benito Cabrera Cuevas, alias "Fabián Ramírez", uno de los 27 miembros de la cúpula guerrillera, tal como informó el propio Santos.
Sin embargo, se está a la espera de que el mismo Gobierno colombiano confirme dicha información.
En su entrevista con el matutino, Santos también habló sobre los acercamientos que ha logrado con Ecuador y Venezuela, países con los que Colombia tenía las relaciones rotas a su llegada a la Casa de Nariño (sede de Gobierno) el pasado 7 de agosto.
Sin embargo, confesó que por la ineficiencia estatal no ha podido pasarse a vivir a la casa presidencial.
"Le voy a dar un ejemplo aterrador: no he podido pasarme a vivir a la casa presidencial" debido a que "la licitación para tapizar los muebles se cayó por tal cosa, que no hay presupuesto para comprar un tapete y el traslado presupuestal se demora tres meses. Minucias inconcebibles", añadió.
EFE
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