"desmilitarización conlleva al abandono de la doctrina de la "seguridad nacional" impuesta por el Pentágono" dice Luciano Marín Arango.
Las FARC propuso este martes una "desmilitarización" de las zonas rurales, la sociedad y el Estado colombiano que implique abandonar lo que consideraron la "doctrina" de "seguridad nacional" impuesta por EE.UU., iniciativa que hace parte de un nuevo paquete de propuestas de esa guerrilla.
En un comunicado leído ante periodistas en La Habana por el número dos de las FARC, Luciano Marín Arango, alias "Iván Márquez", se precisa que esa "desmilitarización conlleva al abandono de la doctrina de la "seguridad nacional" impuesta por el Pentágono" en Colombia.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) consideran que ese proceso debe incluir una "profunda redefinición del pensamiento militar predominante y de la correspondiente reestructuración de las fuerzas militares".
"Se emprenderán acciones para la desmilitarización programada y sistemática de la sociedad y del Estado, en general, y, de manera particular, de las zonas rurales", indicaron las FARC en el comunicado, que contiene un nuevo paquete de propuestas para los diálogos de paz con el Gobierno colombiano.
Además, señalaron que la desmilitarización permitirá la "no estigmatización de las comunidades campesinas, indígenas y afrodescendientes", el reconocimiento de sus territorios y su exclusión de "estrategias contrainsurgentes".
Las nuevas propuestas de la guerrilla están orientadas a lo que llamaron una "justicia social territorial y política macroeconómica para la paz", y forman parte de sus sugerencias a la mesa de conversaciones de paz que se desarrollan en La Habana desde noviembre pasado.
El documento incluye nueve puntos con aportaciones al debate de paz, como la reparación de la "deuda histórica" con el campo y la creación de un "fondo extraordinario" para superar las desigualdades sociales de la población rural.
Otras medidas posibles para las FARC serían acciones de protección a la economía del campo frente a las políticas macroeconómicas y de comercio exterior, y de "encadenamiento equitativo" entre las economías rurales y urbanas.
Entre las propuestas también se prevé el desarrollo de programas territoriales enfocados en "el buen vivir" de la población en el campo, y el "reconocimiento de la riqueza pluriétnica y multicultural" de ese grupo social.
Por último, la guerrilla ha pedido una organización institucional para democratizar las relaciones entre la ciudad y el campo, que garantice los derechos políticos, económicos, sociales, ambientales y culturales de la población rural.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Gobierno de Juan Manuel Santos iniciaron en Cuba el 19 noviembre pasado las negociaciones para poner fin al conflicto armado que azota al país desde hace medio siglo.
Desde entonces, la guerrilla ha presentado a la mesa varias aportaciones relacionadas con el tema agrario, primer punto en la agenda del proceso. EFE
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