Los acusados, de origen somalí y de edades comprendidas entre los 20 y 24 años, cometieron entre 2011 y 2013 violaciones, mantuvieron relaciones sexuales con menores, facilitaron la prostitución infantil y traficaron y pagaron por servicios sexuales con menores.
Trece hombres han sido declarados culpables de cometer delitos sexuales, entre ellos violación y prostitución, contra adolescentes en la localidad de Bristol, en el suroeste de Inglaterra, informaron este jueves fuentes judiciales.
El Tribunal de Bristol ha considerado probado que los acusados, de origen somalí y de edades comprendidas entre los 20 y 24 años, cometieron entre 2011 y 2013 violaciones, mantuvieron relaciones sexuales con menores, facilitaron la prostitución infantil y traficaron y pagaron por servicios sexuales con menores.
Siete de ellos fueron condenados ayer miércoles y otros seis el pasado julio, pero no se ha hecho público hasta hoy dado que en este proceso estaban implicados menores, precisaron las fuentes.
Los siete últimos condenados conocerán este viernes la pena impuesta por el Tribunal de Bristol, mientras que a los otros seis se les impusieron en julio penas de hasta 13 años de cárcel.
Según la cadena BBC, el primer juicio giró en torno a las actividades de un grupo de traficantes de droga de Bristol y el abuso perpetrado principalmente contra una chica de 16 años que había sido alojada en un apartamento por las autoridades sociales, pero a la que apenas se prestó atención o supervisión.
Su hermana, de 14 años, también fue violada en el apartamento de esta localidad del sur del Reino Unido.
En su sentencia del pasado julio, el juez instructor, Michael Roach, aseguró que la banda se "aprovechó" de las adolescentes.
"Espero que las autoridades tendrán la oportunidad ahora de revaluar su decisión respecto al alojamiento elegido porque, en retrospectiva, contribuyó sobremanera al daño causado", dijo el magistrado.
El segundo proceso centró sus vistas en torno a otro grupo de hombres que se ganó la confianza de cuatro chicas para después abusar sexualmente de ellas.
En algunos casos, explicó este medio, se les pagó 30 libras (casi 38 euros) o se les ofreció drogas y alcohol para que mantuvieran relaciones sexuales con otros adultos pertenecientes a la comunidad somalí en Bristol.
Sus abusadores también las persuadieron para que mantuvieran sexo con otros miembros del grupo diciendo que se trataba de una "tradición de la cultura" de Somalia, donde "los hombres siempre tienen relaciones sexuales con las novias de otros".
EFE
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