Iglesia ha publicado un comunicado en el que niega todo lo que cuenta el joven y asegura que ninguna persona está obligada a permanecer en el centro.
Un australiano de 21 años, identificado como Shanke Kelsey, contó al programa «Today Tonight» de Channel su historia aciaga en la Iglesia de la Cienciología.
Este joven aseguró que ingresó a un centro administrado por esta iglesia cuando tenía solo ocho años y vivía, junto a otros, en condiciones infrahumanas. Asimismo, contó que eran obligados a laborar hasta 100 horas sin recibir remuneración alguna.
“Viví en un campo de concentración para niños esclavos en la Iglesia de la Cienciología”, explicó indignado Kelsey.
Leían solo textos de la Cienciología
Mencionó también que solo podían leer textos de la Cienciología y que no se les permitía tener acceso a internet ni a otro medio audiovisual.
Refirió que cuando uno cumple 15 años se les saca de la escuela para que comiencen a trabajar más de 14 horas al día por una remuneración máxima de 35 dólares.
Kelsey dejó la Iglesia de la Cienciología, luego de que su padre lo sacó del centro de adoctrinamiento en 2010.
La Iglesia de la Cienciología publicó un comunicado, negando lo narrado por el joven y asegura que ninguna persona está obligada a permanecer en el centro, que sigue funcionando a pesar de las declaraciones del joven de 21 años.
Nick Xenophon, senador independiente, calificó la historia del australiano de “esclavitud infantil” y solicitó a la policía realizar una investigación profunda para conocer cómo opera la Iglesia de la Cienciología.
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