La lactancia materna puede proteger de la depresión en la vida adulta, lo asegura un estudio publicado en la revista científica Psychotherapy and Psychosomatics.
La lactancia materna puede proteger de la depresión en la vida adulta y el que un bebé no sea amamantado ¿se relaciona con una mayor posibilidad de que en la vida adulta padezca depresión?
Sobre el estudio:
• Los investigadores llegaron a la conclusión de que parecía haber una relación entre la lactancia artificial y la depresión, aunque no fuese posible determinar la causa y siempre señalando que son necesarios estudios más amplios para asegurar la afirmación.
• Algunas posibles causas de que los bebés amamantados se demuestre que tienen menores posibilidades de tener depresión serían la relación intensa de la madre y el hijo en el amamantamiento, la producción de oxitocina natural que protege del estrés, el que la lactancia materna proteja de la hipertensión o su propia composición que favorece el desarrollo óptimo del cerebro y del desarrollo cognitivo o emocional.
Más información sobre el estudio, aquí.
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