Los manifestantes, que recibieron de manera solidaria agua y comida, también se han reunido tanto en la Plaza 2 de Mayo como en la Avenida Abancay. De momento se mantienen pacíficos.
Alrededor de la 1.20 p. m., un grupo de manifestantes ya se encontraba reunido a la altura del jirón de la Unión, en el Centro de Lima. El grupo es relativamente numeroso y por el momento se mantiene pacífico.
Los protestantes han recibido la donación solidaria de algunas personas que han llegado en sus vehículos llevando paquetes de agua, tápers con alimentos y se están distribuyendo a todos los manifestantes que se encuentran con banderas, banderolas y pancartas. Una de ella, la más grande, reza: "Nueva República popular. Nueva Constitución. Urgente".
Mientras tanto, la Policía Nacional resguarda todas las entradas de la Plaza San Martín, ubicándose en cada una de las esquinas que la rodea. Algunos comercios y locales han decidido cerrar, aunque los más grandes continúan funcionando.
Por otro lado, los bomberos siguen trabajando a la altura de la cuadra 1 del Jirón Lino Cornejo, donde se produjo el incendio en las manifestaciones del último 19 de enero, para no dejar ningún vestigio de fuego.
Un panorama similar se vive tanto en la Plaza 2 de Mayo como en la Avenida Abancay, donde también se puede observar un conjunto de protestantes reuniéndose. Por el momento no se ha dado inicio a las marchas.
Municipalidad de Lima informó que protestas causaron daños valorizados en 800 mil soles
De acuerdo con el gerente de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML), Abdul Miranda, los daños causados en la capital a raíz de las protestas estarían estimados en aproximadamente 800 mil soles. Estos incluyen afectación del ornato de la ciudad, como luminarias, áreas verdes, arboles destruidos, barandas, bancas ornamentales, entre otras.
Miranda precisó que las cámaras de seguridad de la Municioalidad captaron las imagénes en las que se puede ver a los grupos de manifestantes reuniéndose, así como también los enfrentamientos con la Policía Nacional. En una de ellas, se observa a personas destruir el muro de una vivienda para utilizar los escombros como armas contra las fuerzas del orden.
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