Pese a ello, el Poder Judicial dictó nueve meses de prisión preventiva en su contra.
El coronel PNP Martín Cárdenas Carpio, quien en estado de ebriedad atropelló a una pareja de esposos en el Rímac, pidió perdón por el daño causado y se comprometió a pagar los gastos que genere la recuperación de las víctimas.
“Estoy muy arrepentido. Asumo mi responsabilidad en la parte penal y administrativa. Me comprometo a apoyar económicamente, a resarcir los daños a las personas agraviadas”, dijo durante la audiencia judicial.
Sin embargo, su actitud sumisa no cambió la decisión del juez, que dictó nueve meses de prisión preventiva en su contra. El alto mando, ya separado de la institución, afrontará desde la cárcel el proceso que se le sigue por los presuntos delitos de lesiones culposas agravadas y peligro común.
Los familiares de las víctimas dijeron no creer en el arrepentimiento de Cárdenas Carpio, teniendo en cuenta que al momento del accidente intentó darse a la fuga. “Si estuviera arrepentido, al momento del accidente se hubiera parado a auxiliar”, dijo una pariente de las víctimas.
En las próximas horas el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) definirá el penal en el que será recluido el coronel.
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