Lizmar Hernández Farías fue vista por última vez el 30 de diciembre, cuando le pidió a su empleador permiso para salir por una horas. No la volvieron a ver. La División de Homicidios de la Policía Nacional investiga su asesinato.
En un video publicado en su cuenta de Facebook, el 26 de diciembre, se le observa feliz y bailando una cumbia peruana. Solo cuatro días después, un día antes de Año Nuevo, desaparecería luego de avisarle a su jefe que se tomaría una pausa de una hora. Este último miércoles su cuerpo fue identificado en la Morgue Central de Lima por sus familiares.
Lizmar Hernández Farías (27), una joven de nacionalidad venezolana, fue hallada muerta el mismo día que desapareció, a las 2 de la tarde, luego de salir de la vivienda en la que cuidaba a un adulto mayor para tomarse una pausa. De acuerdo con La República, su cuerpo fue encontrado en una quebrada, en Canta, con un impacto de bala. Desde esa fecha estuvo en la morgue como NN, a pesar de que sus familiares y su empleador denunciaron su desaparición.
La última persona que la vio con vida fue Cosme Villegas, quien aseguró que abandonó su casa alrededor de las 8 de la mañana y denunció su desaparición al Ministerio de Trabajo. La familia de la fallecida no ha podido corroborar su versión debido a que aún no tienen acceso a las cámaras de seguridad.
“Ella vivía en casa de su jefe, no le gustaba salir sola por la situación que hay. Desde el domingo que yo estuve con ella, perdí contacto, la he llamado, le he escrito y no me responde. La embarqué en el Metro y me confirmó que había llegado”, indicó su tío, José Gregorio Farías, quien pide que se realicen las investigaciones del caso.
Comparte esta noticia