Tessa Blanchard consiguió ser la primera mujer en ganar el campeonato principal de una promoción grande de lucha libre

Generalmente, las empresas de lucha libre separan las divisiones masculinas y femeninas en su show. Ocasionalmente, realizan peleas mixtas de relevos (como la lucha entre Seth Rollins y Becky Lynch contra Baron Corbin y Lacey Evans en WWE), pero no suelen poner a luchar varón contra mujer directamente en peleas individuales ni mucho menos por el campeonato principal de la empresa.

Sin embargo, Impact Wrestling (antes conocida como TNA) decidió romper todos los estándares tradicionales de la industria y coronó como su campeón mundial a Tessa Blanchard luego de su victoria ante Sami Callihan en el evento Hard to Kill 2020.

En medio de una historia de superación, Blanchard contaba con el apoyo del público de la empresa. El encuentro era el más esperado de la noche.

Tessa protagonizó una pelea épica. Aplicó y resistió movidas asombrosas sin ningún reparo, logrando que los asistentes al recinto se unan a ella durante el espectáculo.

Tras una asombrosa DDT, Blanchard derrotó a Callihan se convirtió en la primera mujer en conseguir dicho campeonato, el cual ha sido portado por legendarios luchadores como Mick Foley, Kurt Angle o Jeff Hardy.

Sin embargo, su semana de coronación se vio opacada en redes. El sábado, la luchadora publicó en Twitter un mensaje de apoyo hacia las mujeres en la industria. Al viralizarse, otras féminas replicaron su publicación mencionando ocasiones en las que Blanchard las golpeaba en bastidores o les decía frases racistas.

Blanchard acabó con el reinado de Callihan de 79 días en la empresa. Por su victoria, pasará a la historia en la industria de la lucha libre.

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