La medida fue anunciada por el presidente Kais Saied, quien precisó que el confinamiento iniciará el domingo. Túnez ya afronta un toque de queda y el cierre de todas sus fronteras por el incremento de casos del COVID-19 y su primer muerto.
El presidente de Túnez, Kais Saied, anunció este viernes el confinamiento del país desde el domingo, después de haber registrado un aumento en el número de infectados por el nuevo coronavirus.
El Gobierno ya había anunciado el cierre de sus fronteras marítimas, terrestres y aéreas, está sometido desde el miércoles a un toque de queda desde el anochecer hasta el amanecer.
A partir del domingo, la población deberá quedar confinada en sus domicilios hasta el 4 de abril, salvo quienes trabajan en sectores vitales.
Hasta el momento se han realizado solo 690 pruebas, de las cuales 54 son casos confirmados hasta hoy, además ayer registraron su primer fallecido por el COVID-19.
Durante una alocución televisada, el presidente afirmó que todos deben quedarse en casa y salir sólo en casos de "extrema necesidad". Quedarán prohibidos los desplazamientos de una región a otra salvo por "razones legítimas".
Se cerrarán los grandes supermercados pero se abastecerán las tiendas de alimentos de barrio, así como los centros industriales donde trabaja un gran número de empleados.
El presidente abogó por una solución coordinada a nivel internacional en el marco de Naciones Unidas.
AFP
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