La suspensión de Dilma Rousseff se tomó por 55 votos a favor, 22 en contra y una abstención. Durante estos 6 meses se inicia el juicio político que la llevaría a ser destituida de su cargo.
(Actualización: Jueves 12 de mayo, 5:30 a.m.) Dilma Rousseff dará su último discurso oficial en el Palacio del Planalto luego de ser suspensida por 180 días por el Senado de Brasil. La presidente de Brasil, que quedó apartada de su cargo en la mañana del jueves, hablará a las 10 desde la sede del Poder Ejecutivo. Se espera que Rousseff mantenga el tono de sus últimas apariciones y vuelva a considerarse "víctima de un golpe" y que se refiera al poder "ilegítimo" de Michel Temer, quien la reemplazará en las funciones a las 15, hora local, del jueves.
Lula la acompañará
El ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva esperará a su sucesora Dilma Rousseff frente al Palacio del Planalto este jueves, una vez que la mandataria deje la sede del Poder Ejecutivo para cumplir su suspensión del cargo por hasta 180 días.
Por consejo de Lula, Dilma no descenderá la simbólica rampa del Planalto, como era su idea inicial. Dicha instalación es usada por cada mandatario entrante y saliente. Según el ex sindicalista y presidente de Brasil entre 2003 y 2010, ese sería un acto de "fin de gobierno" y Dilma debe mostrar que "resistirá hasta el fin" del proceso de impeachment.
(Actualización: Jueves 15 de mayo, 4:34 a.m.) El Senado de Brasil aprobó este jueves someter a un juicio político a la mandataria Dilma Rousseff y la apartó del cargo por hasta 180 días, tiempo máximo para que concluya el proceso y en el que será sustituida por su vicepresidente, Michel Temer. En la votación, que se produjo después de una sesión continua de 20 horas y media de duración, 55 senadores se pronunciaron a favor del juicio político, 22 votaron en contra, mientras que cuatro estuvieron ausentes. La jornada se inició en el Senado de Brasil a las 10:00 am (8:00 am hora peruana).
Para abrir el juicio político contra Rousseff bastaba con una mayoría simple, pero con este resultado, se rebasó el umbral de la mayoría calificada de dos tercios, 54 de los 81 senadores, que son necesarios para lograr la destitución definitiva al final del proceso. El Senado tiene previsto comunicar su decisión hoy mismo a Rousseff, que ha anunciado que pretende realizar un pronunciamiento en torno a las 10.00 hora local (13.00 GMT) antes de dejar el palacio de Planalto.
(Actualización: Jueves 12 de mayo, 4.05 a.m.) Los senadores brasileños concluyeron los debates previos a la votación sobre el inicio del juicio político a la presidenta del país, Dilma Rousseff, y por el que previsiblemente hoy mismo será apartada del cargo de forma temporal. l final de los debates, que se prolongaron durante 21 horas, hablaron 71 senadores, de los que 50 se pronunciaron a favor del proceso contra Rousseff, 20 en contra y uno no aclaró sus intenciones.
A continuación comienza el último turno del autor del informe acusador en la Cámara alta, el senador Antonio Anastasia, que dispondrá de quince minutos, y del abogado del Estado, José Eduardo Cardozo, que dispondrá del mismo tiempo para hacer un último alegato en defensa de Dilma antes de la votación.
(Actualización: Jueves 12 de mayo, 2:00 am). Más de la mitad de los senadores de Brasil, 41 de los 81 integrantes de la Cámara alta, se declararon en sus discursos a favor de someter a un juicio político a la presidenta del país, Dilma Rousseff, y a apartarla del cargo. Cuando se han cumplido las primeras 18 horas de una sesión que ya entró en la madrugada de este jueves, tomaron la palabra 58 senadores, de los cuales 41 declararon su inclinación a aprobar el juicio político, 16 se manifestaron en contra y sólo uno no aclaró sus intenciones.
La apertura del juicio político se decidirá por mayoría simple, por lo que, si los senadores confirman con su voto la opinión que han proferido desde la tribuna de oradores, Rousseff será separada del cargo hoy mismo durante los 180 días que puede durar el proceso. En ese caso, su lugar sería ocupado por el vicepresidente, Michel Temer, quien debería completar el mandato presidencial que concluye el 1 de enero de 2019 en caso de la definitiva destitución. El senador que, con su discurso, inclinó la balanza hacia el llamado "impeachment" fue Blairo Maggi, quien aseguró que ha recibido la invitación de Temer de asumir a partir de este jueves el Ministerio de Agricultura.
(Actualización: Miércoles 11 de mayo, 11:58 p.m.) La policía de Brasilia arrestó a un hombre sospechoso de lanzar piedras contra los agentes durante la manifestación de partidarios de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, celebrada mientras el Senado debate si procesa a la jefa de Estado, informaron fuentes oficiales. Después del lanzamiento de piedras, la policía usó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes controlados en la Explanada de los Ministerios. Según cálculos de la Policía, cerca de 5.000 personas se concentraron en el centro de la capital, 4.000 de ellos favorables a la destitución de Rousseff y cerca de mil partidarios de la mandataria, que estaban separados por una valla.
Pasada la media noche, cuando la sesión del Senado superaba las doce horas de deliberaciones, sólo quedaba en la calle un grupo de pocos cientos de personas. En la mayoría de las ciudades de Brasil, las calles estaban desiertas, a la espera del veredicto que pronunciará en una horas el Senado, en cuyas manos está decidir el futuro de Rousseff.
(Miércoles 11:47:36 AM)
La Corte Suprema de Brasil ha rechazado la solicitud del gobierno para anular la votación que se lleva a cabo en el Senado. Esto deja con aún menos opciones a la presidenta.
La previa
El Senado brasileño decide este miércoles si la presidenta Dilma Rousseff responderá a un juicio político con miras a su posible destitución, lo cual implicaría su suspensión del cargo durante seis meses y la asunción al poder del vicepresidente Michel Temer.
El proceso, que se ha arrastrado desde diciembre pasado, cuando fue aceptado a trámite en la Cámara de Diputados, llega a uno de sus puntos culminantes con la oposición envalentonada por sondeos entre los senadores que le auguran más que la mayoría necesaria para aprobar lo que en Brasil se conoce como "impeachment".
En un intento postrero por impedir esa votación o la aplicación de su resultado, la Abogacía General del Estado, que defiende a la presidenta, intentó el martes un último recurso ante la Corte Suprema en el que exige la "nulidad" del proceso, pese a que casi no existen posibilidades de que prospere.
Suspensión se votará desde las 7 a.m.
Según ratificó el presidente del Senado, Renán Calheiros, tras reunirse con los jefes de los grupos de los partidos representados en esa cámara, la sesión comenzará este miércoles a las 09.00 hora local (12.00 GMT) y puede prolongarse hasta la madrugada del jueves.
Cada uno de los 81 senadores tendrá derecho a ejercer la palabra durante diez minutos, aunque en la oposición hay parlamentarios dispuestos a renunciar a ese tiempo a fin de acelerar el trámite.
Para que el juicio político sea instaurado, los partidarios del "impeachment" precisan una mayoría simple de 41 votos entre los 81 senadores.
Sin embargo, la intención de la oposición es rebañar votos hasta último momento para llegar a 54, equivalentes a la mayoría calificada de dos tercios que, una vez que concluya el juicio, será necesaria para que Rousseff sea finalmente destituida.
En ese último caso, fuentes del opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), uno de los principales impulsores del proceso contra Rousseff, dijeron a Efe que con esos 54 votos se le transmitiría "el mensaje de que no hay retorno posible".
Ello responde a que, si Rousseff fuera absuelta una vez que el proceso concluya, recuperará el cargo y desplazará a Temer, que debería regresar a una vicepresidencia que, según coinciden todos los analistas, sería absolutamente insostenible.
Michel Temer, el hombre que gobernará Brasil si cae Rousseff
Temer, que en las últimas semanas se ha dedicado a consultas para la conformación de su eventual Gobierno, visitó a Calheiros en su residencia y, según fuentes de su entorno, conversaron sobre los procedimientos para que tome posesión de la presidencia.
A diferencia de lo sucedido el pasado 17 de abril, cuando la Cámara de Diputados votó por la continuidad del proceso, este miércoles no se esperan grandes manifestaciones frente al Parlamento.
De todos modos, en previsión de incidentes, las autoridades han vuelto a instalar una enorme valla que divide en dos los jardines frente al Congreso, a fin de que a un lado se concentre el bloque de apoyo a Rousseff y al otro aquellos que defienden el "impechament".
Rousseff saca sus cosas de Palacio
Rousseff ya ha aceptado que este miércoles no tendrá la mayoría simple que evitaría su separación del cargo, por lo que ha empezado a mudar sus pertenencias del Palacio presidencial de Planalto al Palacio de la Alvorada, su residencia oficial.
La mandataria, que sólo estará suspendida del cargo mientras dure el proceso, tendrá derecho a utilizar el Palacio de la Alvorada, que, según fuentes oficiales consultadas por a Efe, pretende convertir en el "fortín de la resistencia" a lo que califica de "golpe".
Marchas
De hecho, para el momento en que sea notificada de la decisión que la separará del cargo, se prevé que Rousseff encabece una marcha con simpatizantes que caminarán con ella a lo largo de cuatro kilómetros entre los palacios de Planalto y la Alvorada.
Si esa marcha se confirma, pasará frente al Palacio de Jaburú, residencia oficial de Temer y separada por un kilómetro de parques del futuro "fortín de la resistencia".
Muchos de quienes prometieron estar en esa marcha asistieron este miércoles al que pudo haber sido el último discurso de Rousseff durante su mandato, en el marco de un congreso sobre políticas para la mujer.
"Estoy cansada de los desleales y los traidores, pero no de luchar", afirmó Rousseff, quien reiteró que defenderá su mandato y no renunciará, pues mientras siga "de pie, con la cabeza erguida, quedará claro que han cometido una enorme injusticia".
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