La imagen de un salvadoreño de 25 años con su menor hija ahogados tras intentar cruzar un rio en la frontera de México con Estados Unidos ha conmocionado al mundo y encedidos las críticas sobre las políticas migratorias.
El presidente Donald Trump dijo que odia ver la fotografía de los cuerpos de un migrante salvadoreño y su pequeña hija de dos años, que se ahogaron cuando intentaban cruzar el río Bravo en la frontera entre México y Estados Unidos.
"La odio", dijo el mandatario sobre la foto. "El padre... probablemente era un tipo fantástico", agregó e insistió en que la oposición demócrata es responsable de la muerte de migrantes indocumentados debido a su negativa a respaldar su política migratoria.
El salvadoreño de 25 años, que trabajaba como cocinero en su país, colocó a su hija por dentro de su camiseta para intentar atravesar el río, pero se hundieron ante la mirada de la madre de la niña antes de llegar al lado estadounidense. La imagen de sus cuerpos, encontrados boca abajo, conmocionó al país.
La familia había llegado a Tapachula, Chiapas, la semana pasada. El domingo por la tarde, decidieron cruzar a Estados Unidos, según el expediente.
La mujer de 21 años también trató de pasar el afluente acompañada por otro amigo de la familia, pero ambos desistieron y regresaron al lado mexicano. El agotado padre y la niña se hundieron en el fuerte caudal del río antes de llegar a la orilla estadounidense.
La imagen causó indignación y encendidas críticas, que aseguran que la detención de estos migrantes por parte de autoridades mexicanas constituye un muro invisible, en alusión a la amenaza del presidente estadounidense Donald Trump de hacer pagar a México por una nueva muralla fronteriza que frene la migración
AFP
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