Iván Crisóstomo es aplaudido en el mundo por arriesgar su vida al desafiar a una red de trata de personas para proteger a Crystal Allen, una adolescente estadounidense de 16 años que escapó de sus secuestradores porque iba a ser asesinada.
Iván Crisóstomo, un peruano que trabaja como cartero en Estados Unidos desde hace 25 años es aclamado como un héroe en el mundo por protagonizar una gran hazaña: prestar atención rápida a una adolescente que había caído en las garras de una pandilla asesina, una red de trata de personas.
La mañana del viernes 8 de junio, Iván se encontraba en las calles de California haciendo su trabajo regular, sin contratiempos. De pronto escuchó detrás de un árbol el llanto de una mujer. "Era un llanto diferente de otro llanto, se ahogaba”, relató a RPP.
“Me acerqué y la chica estaba asustada, respeté su silencio, me moví para continuar con mi labor y cuando escuché la intensidad del llanto regresé y me dije a mi mismo, no me voy de acá hasta que me cuente que es lo que está pasando”, dijo.
La joven tenía un aspecto deplorable, le temblaban las manos, no paraban de brotarle las lágrimas y finalmente se abrió. Con la voz entrecortada le contó que había sido drogada, torturada y abusada sexualmente durante tres meses.
“Lo que ocurrió es que ella escapó en un acto de desesperación de un coche en el que la estaban trasladando unos hombres. Estaban discutiendo sobre un crimen, pero también hablaban de cómo se iban a deshacer de ella, de cómo la iban a matar”, explicó Crisóstomo.
“Vienen a agarrarme de nuevo, me van agarrar”, le decía la joven mientras él intentaba calmarla. Crisóstomo comprendió entonces que se encontraba frente a un caso dramático y muy delicado, pero aun así arriesgó su vida quedándose a su lado.
“Me quedé parado en medio de la calle, para que vean que ella no está sola, que alguien está protegiéndola, fue un momento bien dramático en cualquier momento esta gente que no es buena, que porta arma se podría presentar en cualquier momento”, comentó.
Mientras Iván cuidaba de Crystal Allen, usaron el celular del secuestrador que había robado la joven para intentar comunicarse con su familia. La primera llamada fue con la Policía y después con la madre de la víctima, Stacy Ohman, quien le suplicó a Iván que por nada del mundo dejara sola a su hija hasta que lleguen los oficiales.
El Departamento del Sheriff de Sacramento reconoció a Crisóstomo el jueves pasado por las heroicas medidas que tomó para proteger la vida de la adolescente que estuvo desaparecida. "Iván mismo es un héroe por salvarme, aunque él no se lo crea", dijo Allen al canal FOX 40.
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