Maikel Moreno, titular del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, fue sometido a la prueba respectiva y ahora permanece en aislamiento. Hasta el momento, hay 50 905 contagios y 412 muertes de acuerdo con las cifras del régimen, cuya veracidad es cuestionada por la oposición.
El presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Maikel Moreno, informó este sábado que dio positivo a una prueba del nuevo coronavirus, con lo que se suma a la lista de altos funcionarios del régimen chavista contagiados con la enfermedad.
De acuerdo con un comunicado difundido por el TSJ, Moreno se sometió a la prueba respectiva y tras conocer el resultado procedió a su respectivo aislamiento, donde se le procurarán “los cuidados necesarios para superar la infección viral”.
El texto añade que Moreno, al frente de la máxima corte de línea chavista, señalada por la oposición de favorecer con sus decisiones al Gobierno socialista, “se encuentra en buenas condiciones generales, cumpliendo de manera rigurosa con las recomendaciones médicas”.
Desde que la pandemia llegó en marzo pasado al país, de 30 millones de habitantes, el Gobierno de Nicolás Maduro confirmó que hasta el momento hay 50 905 contagios y 412 muertes. Sin embargo, estas cifras son cuestionadas por la oposición y oenegés, pues consideran que ocultan una realidad mucho peor.
Varios dirigentes venezolanos anunciaron en las últimas semanas que dieron positivo a la COVID-19, entre ellos Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Constituyente y número dos del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV); el ministro de Petróleo, Tareck El Aissami; y el jefe de Gobierno de Caracas, el dirigente chavista Darío Vivas.
Vivas murió el 13 de agosto a los 70 años, casi un mes después de haber dado positivo en un test de la enfermedad y se convirtió en el primer funcionario próximo del régimen de Maduro en fallecer por el nuevo coronavirus, cuya propagación se acelera en Venezuela.
Cabello y El Aissami aseguraron, por su parte, haber superado la enfermedad, al igual que Rodríguez.
AFP
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