"Estoy muy agradecido. Gracias a Dios por encima de todo", indicó al compartir el concierto con Rubén Blades y Juan Luis Guerra.
El cantautor puertorriqueño Draco Rosa se presentó ayer por primera vez en un escenario desde que fue diagnosticado con cáncer en abril del 2011.
Junto al salsero panameño Rubén Blades y el merenguero dominicano Juan Luis Guerra, se presentó en el espectáculo "Encuentro".
El concierto, al cual acudieron más de 13.500 personas en el coliseo de Puerto Rico José M. Agrelot en San Juan, comenzó con el emblemático tema "Patria", de Blades, en el cual se unieron también Draco y Guerra.
"Un placer estar aquí. Y lo primero que quiero decir es: qué viva el Gran Combo de Puerto Rico por sus 50 años de carrera. Un saludo para el gran don Rafael (Ithier, director de la orquesta)", expresó Blades.
Blades después saludó a su colega puertorriqueño Cheo Feliciano y su esposa, Cocó, quienes estuvieron en el público, e indicó que ya había terminado de grabar un próximo disco con el artista boricua.
El salsero panameño siguió su presentación con "Vale más un guaguancó" y "La palabra adiós", ambas del fenecido compositor puertorriqueño Catalino "Tite" Curet Alonso.
La segunda parte del espectáculo le tocó a Guerra con "Como yo", "La bilirrubina", "La guagua" "En el cielo no hay hospital", su más reciente sencillo, y "La cosquillita".
El artista dominicano, a quien se le conoce por su mensaje de fe y creencia cristiana, afirmó que Draco Rosa está sano del cáncer que le diagnosticaron en abril del 2011.
Draco Rosa, quien se encuentra en tratamiento contra el cáncer en el abdomen, cerca del hígado, entonces puso el toque romántico con "Noche fría" para después dar sus primeras declaraciones ante su esperado público.
"Me hacía mucha falta estar en la isla y es una noche muy especial. Estoy muy agradecido. Gracias a Dios por encima de todo y a ustedes por mantenerse en contacto. Leo todo, las buenas energías y buena vibra. Estoy positivo, mucha esperanza aquí", aseguró.
El intérprete siguió la velada con "Penélope" y "Aleluya", donde se manifestó eufórico.
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