51 casos de feminicidios se han reportado en lo que va del 2023: ¿qué hacer para revertir las cifras?

Cifras que preocupan, duelen e indignan. Apenas han transcurrido cuatro meses del 2023, no se llega ni a la mitad del año; y en el Perú ya se han reportado 51 feminicidios, según cifras oficiales del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP).

Los casos reportados a la fecha son horripilantes y han generado conmoción en el país: desde una joven de 18 años que fue quemada viva por su expareja en la plaza Dos de Mayo, hasta una enfermera que fue víctima de violación grupal en Puno. Ambas mujeres perdieron la vida en circunstancias crueles.

Katherine Gómez, de apenas 18 años, perdió la vida el 24 marzo. No resistió las graves quemaduras que le propinó su expareja, el venezolano Sergio Tarache, quien le roció gasolina y le prendió fuego. Actualmente, el confeso feminicida se encuentra en Colombia a la espera de ser extraditado a Perú para cumplir los nueve meses de prisión preventiva que le impuso el Poder Judicial.

El 12 de abril, se informó de la muerte de la enfermera de 32 años que fue agredida sexualmente en la ciudad de Ayaviri, provincia de Melgar (Puno). Su estado de salud se había complicado en las últimas semanas; tal es así que el personal médico tuvo que amputarle la pierna derecha a consecuencia de las graves lesiones.

Los casos de ambas mujeres no hacen más que reflejar que la violencia contra las mujeres en el Perú es un tema que, poco o nada, les importa a las autoridades nacionales. Pero ¿qué podemos hacer para revertir este panorama? Especialistas, consultados por RPP Noticias, coincidieron en que es necesario un trabajo conjunto entre el Estado peruano, el Gobierno y la sociedad.

¿Un cambio de mentalidad? 

Para la exministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables Gloria Montenegro, se requiere de un trabajo que “vaya más allá de las políticas públicas y las leyes” impregnadas en un papel.

La también excongresista afirmó que es urgente un trabajo de “conciencia ciudadana”, que consista en reemplazar a la cultura machista, “esa que mata y que te quema viva”, por una sociedad consciente en la importancia de la igualdad de género.

“El problema es grave, las cifras han aumentado, pero el nivel de crueldad ha endurecido enormemente si analizamos y vemos cada uno de estos casos. Por eso es vital ir más allá de las políticas públicas, las leyes, las instituciones para entrar en un trabajo a conciencia ciudadano”, declaró en Enfoque de los Sábados.

“Tenemos que formar a las próximas generaciones para romper ese chip machista”, agregó.

Si bien es un primer paso, Montenegro refirió que también es urgente que el sistema de justicia peruano capacite a sus jueces, fiscales y al personal de Medicina Legal, haciendo énfasis en esta área al recordar que un médico legista calificó de “leves” las lesiones que sufrió la enfermera víctima de violación grupal en Puno.

“Pongo un claro ejemplo, cómo es posible que a la enfermera que ha muerto por esta violación, el médico legista puso lesiones leves. ¿Cómo es posible?, ¿fue un error?, ¿este es el único informe en el que se equivocó?, ¿qué pasó en los otros informes en los que también se equivocó?”, se preguntó.

Asimismo, la extitular del sector Mujer reiteró que la Policía Nacional debe contar con mejores protocolos para tratar las denuncias de las mujeres víctimas de agresiones físicas.

“La Policía y la Fiscalía deben ser capacitadas en el enfoque de género”, insistió.

Añadió que el cambio del “chip machista” también debe iniciar en los hogares. Por eso instó a los padres de familia a educar a sus hijos en igualdad de condiciones.

“Las madres tenemos que dejar de ser machistas y educar en igualdad de condiciones, repartir las tareas con responsabilidad, pero todos ayudar y colaborar en casa”, apuntó.

Un castigo más severo contra los feminicidas

Más severa fue Luisa María Cuculiza. La exministra de la Mujer mostró su indignación por los casos de feminicidios y, por eso, consideró que los feminicidas deben purgar una pena mayor a la cadena perpetua: la condena a muerte. “No pueden seguir viviendo”, dijo ofuscada.

“Estamos viviendo una vida de terror, a las mujeres se les quema, ¡es el colmo! […] ¿Cómo vivimos en un país con tanto odio y bestialidad? Tenemos que ser conscientes de que la mujer tiene que vivir una vida libre, sin presión alguna, y escoger cómo vivir”, comentó.

Piden restablecer el alto comisionado de la Lucha contra la Violencia hacia la Mujer

A su turno, el general PNP Augusto Sánchez Bermúdez, quien fue el primer comisionado de La Lucha contra la Violencia hacia la Mujer, precisó que el Estado, el Gobierno y la sociedad en su conjunto deben abordar el tema de una “manera seria”.

“No solamente debemos actuar cada vez que se presentan estos casos terribles, ver a una mujer quemada viva o sus restos descuartizados, como ha ocurrido en Arequipa”, aseveró.

Al igual que Gloria Montenegro, Sánchez recalcó que la Policía debe mejorar su “capacidad de reacción”, recordando que Sergio Tarache huyó con facilidad a Colombia tras quemar a su expareja en la plaza Dos de Mayo.

“La Policía es la primera autoridad representativa del Estado para atender al ciudadano y a la mujer violentada, tiene que mejorar su capacidad de respuesta. Tiene una gran tarea…”, sentenció.

Además, Sánchez Bermúdez consideró que prudente que se dicten de forma inmediata las medidas de protección a toda aquella mujer que denuncie maltratos.

Por último, el general PNP exhortó a las autoridades actuales a restablecer el alto comisionado de la Lucha contra la Violencia hacia la Mujer, al destacar que este sector no solo trabaja al interior de la Policía, sino de manera intersectorial para atender apropiadamente los casos de agresiones contra las mujeres.