Pobladores manifiestan que han quedado incomunicados por derribe de árboles y palizadas.
El rio Chinchipe, que nace en el Ecuador y llega al Perú entre las provincias de Jaén y San Ignacio, aumentó su caudal provocando desbordes en cementeras de pan arrasando, arrozales y árboles frutales, incluso sus aguas salieron a los pequeños puertos existentes a lo largo de su recorrido.
Desde hace dos días, el río Chinchipe se halla con sus aguas turbias y crecidas, lo que trae palizadas, derriba árboles y ha dejado incomunicado a los ribereños de una banda hacia la otra.
Las pequeñas embarcaciones aéreas llamados "huaros", balsas cautivas y botes a motor fuera de borda, han dejado de operar hasta que el caudal baje informan lugareños, por lo que se ha convertido en un riesgo para ellos.
Lea más noticias de la región Amazonas
Comparte esta noticia