Expresidenta del Consejo Regional de Decanos, Maria Elena Guillén, este jueves fue citada a declarar ante el Ministerio Público.
Una sanción con prisión efectiva pide la empresa Sedapar contra la expresidenta del Consejo Regional de Decanos (Conrede) de Arequipa, Maria Elena Guillén Núñez, quien el año pasado denunció la distribución de agua potable con olor fétido en la ciudad.
La profesional fue citada este jueves a declarar ante la fiscal Isabel Cristina del Ministerio Público, al ser acusada por el delito de perturbar la tranquilidad pública al crear pánico, desinformar y alarmar a la población sobre la calidad del agua.
La ex presidenta de los colegios profesionales indicó que solo cumplió con su deber de pronunciarse sobre los informes de la calidad de agua realizados por la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) y la Universidad Católica de Santa María, que revelaban la contaminación del líquido elemento.
“No he hecho nada malo. Soy responsable de todo lo vertido en esa época, pues lo hice en protección y salvaguarda de la salud pública, y hasta este malestar fue expresado por la misma ciudadanía”, declaró Guillén Núñez tras rendir su manifestación.
Al momento, la profesional ha sido la única denunciada por la empresa prestadora del servicio de agua potable.
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