Los expertos de la ONU señalaron que el caso de Fujimori no reunía las condiciones para ser favorecido con un indulto humanitario.
Expertos de la ONU en derechos humanos calificaron este jueves el indulto otorgado a Alberto Fujimori como "una bofetada" para las víctimas de las violaciones de derechos humanos ocurridas mientras el expresidente gobernó el país entre 1990 y 2000.
"El perdón presidencial concedido a Alberto Fujimori por motivos políticos socava el trabajo de la justicia peruana y de la comunidad internacional para lograr la justicia", señalaron la francesa Agnès Callamard, relatora especial para las ejecuciones sumarias o arbitrarias, y el colombiano Pablo de Greiff, relator especial de la ONU para la promoción de la verdad, la justicia y la reparación.
El pasado domingo 24, el jefe del Estado, Pedro Pablo Kuczynski (PPK), concedió el perdón presidencial a Fujimori, condenado a 25 años de prisión por las matanzas de Barrios Altos, La Cantuta y los secuestros del periodista Gustavo Gorriti y el empresario Samuel Dyer Ampudia.
"Esta ha sido quizás la decisión más difícil de mi vida. Se trata de la salud y las posibilidades de vida de un expresidente del Perú que habiendo cometido excesos y errores gravísimos fue sentenciado y ha cumplido ya doce años de condena", dijo en un mensaje a la Nación.
"Revés para el Estado de derecho"
"También es un gran revés para el Estado de derecho en Perú: se concedió un indulto humanitario a alguien condenado por crímenes graves tras un juicio justo, cuya culpabilidad no está en entredicho y que no cumple con los requisitos legales para un indulto", dijeron los expertos de la ONU en un comunicado.
Agnès Callamard y Pablo de Greiff explicaron también que los casos que pueden conducir a liberaciones consideradas humanitarias requieren un proceso riguroso, creíble y transparente compatible con las normas internacionales en materia de derechos humanos.
"El derecho internacional en materia de derechos humanos restringe la concesión de amnistías, perdones y otras exclusiones de responsabilidad en casos de violaciones graves de los derechos humanos, como asesinatos extrajudiciales y desapariciones forzadas".
Los relatores de la ONU comentaron en el comunicado que "Fujimori debe ser tratado como cualquier otra persona hallada culpable de graves violaciones de los derechos humanos".
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