Durante la diligencia, los padres de tres implicados en el caso pidieron que se les varíe la orden de prisión preventiva por la de comparecencia restringida para que puedan defenderse.
La fiscal Karla Vásquez, titular de la Fiscalía Supraprovincial Especializada Contra la Criminalidad Organizada, inspeccionó tres locales, donde habría funcionado “La Centralita” durante el gobierno del encarcelado exgobernador de la región Áncash, César Álvarez Aguilar.
La diligencia se inició en el inmueble ubicado en la urbanización la caleta, donde la verificación se realizó en un tiempo muy corto.
Hasta este lugar llegaron los familiares de Ingrid Casas, Felipe Bermúdez y Leana Corcuera –jóvenes comunicadores implicados en este sonado caso- para protestar y exigir que cambien la orden de prisión preventiva que pesa sobre ellos por la de comparecencia restringida para que puedan defenderse.
Con lágrimas en los ojos, Casilda Mendieta, madre de Felipe Bermúdez, pidió justicia para su hijo. Aseguró que es inocente y que tiene medios para demostrarlo.
La abogada de César Álvarez, Jéssica Arteaga, también acompañó las diligencias y expresó que el exgobernador no acudía asiduamente a “La Centralita”, sino que pasaba por ahí porque tenía que dejar a sus hijos en un colegio cercano.
Los otros dos locales que inspeccionó la fiscal están ubicados en la zona de Huanchaquito y en la intersección de los jirones Leoncio Prado y Manuel Villavicencio.
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