"Yo tengo mis pies hinchados, sufro de várices. Pido a los manifestantes que nos dejen pasar, ya no hay plata para comer. Estamos en pandemia, nos puede agarrar el virus", dijo la señora de 60 años.
Desde hace cuatro días doña Gertrudis Anco Águila, de 60 años, se encuentra varada en la región Ica, debido al bloqueo de la carretera Panamericana Sur por trabajadores de agroexportadoras, que piden mejores condiciones laborales. Ella se quedó sin dinero y para poder comer pidió trabajar en un restaurante, cuya dueña se hizo su amiga.
“Estaba viajando de Arequipa a Lima y al buscar bañito, conocí a la señora. Estamos cuatro días, ya no hay plata. Mira, para ganarme la vida estoy cobrando por el bañito a cambio de un plato de comida”, dijo.
La señora Enma, dueña del local ubicado en el Km 300 de la Panamericana Sur, zona de El Álamo, le dejó como labor cobrar por el uso del servicio higiénico a los demás pasajeros varados o pobladores de la zona.
Doña Gertrudis tienen algunas dolencias propias de su edad, como las varices de las que fue operada en varias ocasiones.
“Yo tengo mis pies hinchados, sufro de várices, pido a los manifestantes que nos dejen pasar. En este tiempo del nuevo coronavirus, nos puede agarrar. Los niños y adultos mayores somos los vulnerables”, dijo.
Así como doña Gertrudis, hay cientos de personas varadas que no tienen dinero para un plato de comida y sobreviven gracias a la ayuda de otras personas.
Lamentablemente hoy se volvió a romper el diálogo entre los trabajadores agrarios y el Gobierno por lo que la vía sigue bloqueada.
Comparte esta noticia