Artefacto detonó en una vivienda en la urbanización El Cortijo. Agentes de intervenciones rápidas municipales acudieron a la emergencia.
Una madre y sus tres hijos se salvaron de morir tras la explosión una bomba lagrimogena que era manipulada por uno de los menores en la ciudad de Trujillo.
Toda la familia salió despavorida de su domicilio en la urbanización El Cortijo al detonar el artefacto que dejó quemados los colchones, ropa, y otros objetos.
Betti Caycho Luna de 36 años, su bebé y dos niñas salieron de inmediato para no ser calcinados e intoxicados con el humo. El grupo de Intervenciones Rápidas Municipales de Trujillo (IRAM) acudió a la emergencia.
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