Robert Arrascue Chapilliquén sufre de insuficiencia renal crónica terminal y cada vez que recibe su tratamiento de hemodiálisis necesita donde recuperase para luego regresar a Cayaltí, ciudad donde vive. Su padre le niega un lugar para descansar.
Su nombre es Robert Arrascue Chapilliquén, tiene 50 años de edad y sufre de insuficiencia renal crónica terminal desde hace 11 años, vive en el distrito chiclayano de Cayaltí (región Lambayeque), desde donde se traslada para recibir sus sesiones de hemodiálisis, y esta mañana no encontró otra forma de pedirle ayuda que encadenándose a la ventana de la vivienda de su progenitor.
Según señaló, su padre Héctor Alonso Arrascue Dávila, no quiere proporcionarle un lugar en su casa, donde descansar después de que recibe las terapias. “Salir del tratamiento es duro, me descompenso: me duele el cuerpo, los huesos, no puedo caminar y solo necesito un lugar donde recuperarme; pero mi padre se niega a brindármelo a pesar de que tienen una gran casa”, señaló a RPP Noticias.
Robert, espera que su padre se conmueva y entienda la difícil situación por la que atraviesa y pueda brindarle alojamiento, tan igual como se lo da a sus hermanos. “Nunca me ha ayudado, siempre me ha negado todo, en cambio para sus otros hijos si tiene y puede.
Su esposa actual es la directora de la escuela de post grado de una conocida universidad, ella lo debe hacer entender de que necesito ayuda, solo le pido un lugar donde descansar”.
RPP buscó conocer la versión del señor Héctor Arrascue, padre de Robert, pero no se encontraba en la vivienda que está ubicada en la cuadra 4 de la calle Eugenio Moya en Chiclayo.
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