Fiscales retenidos por indígenas escaparon de madrugada

Los fiscales retenidos contra su voluntad por nativos del río Marañón, en el sector de Saramurillo, en la región Loreto, lograron escapar de madrugada, aprovechando un descuido de sus captores.

La versión del retenido. Así lo contó a RPP Noticias José Miguel Palacios, uno de los fiscales retenidos, quien dijo que todo comenzó el jueves a las 4 p.m. cuando se dirigían a la comunidad de Monterrico, precisamente para solucionar un tema de derrame de petróleo.

No cumplieron lo dicho. Palacios dijo que los indígenas les dijeron que iban a ser retenidos por 24 horas como parte de la huelga indefinida que acatan desde hace 30 días por los constantes derrames de petróleo en la zona. Sin embargo, pasado ese plazo, continuaban secuestrados.

El escape. “Ayer en la madrugada, ante un descuido de ellos, fugamos. Cortamos los cabos con los que habían asegurado nuestra nave y tuvimos que huir aproximadamente a las tres de la mañana”, relató el fiscal, quien dijo que en su embarcación viajaban en total nueve personas, las mismas que llegaron esta mañana a Nauta.

Es así que partieron de Saramurillo, José Miguel Palacios Martínez, Fiscal Provincial Penal Corporativo de Loreto; Paola Tatiana Mendoza del Río, Fiscal Provincial especializada en materia ambiental de Nauta; Saulo Camilo Ríos Vásquez, asistente de función fiscal; Cuiery Augusto Montes Montilla, asistente de función fiscal; Miguel Carrera Muñoz, biólogo y perito del equipo forense especializado en materia ambiental del Instituto de Medicina Legal del Ministerio Público; Germán Cárdenas Chávez, miembro de la Policía Nacional del Perú y perito de la OFICRI de Loreto; Carlos Javier Herrera Reto, abogado apoderado de Petroperú; y dos tripulantes de la embarcación que pidieron mantener sus nombres en reserva para evitar represalias contra ellos. Actualmente todos se encuentran en la ciudad de Nauta y en buenas condiciones de salud.

Cientos de retenidos. Palacios dijo que en determinado momento los nativos habían retenido más de 400 personas en diversas embarcaciones, una cifra muy superior a estimaciones iniciales. Si bien, los retenidos han ido siendo liberados, los pobladores aún tienen aproximadamente 200 personas en su poder.