Alan García aprobó que el MTC se ocupe por completo de la ejecución luego de reunirse con el exministro Enrique Cornejo y el exgerente de Odebrecht Perú, Jorge Barata.
El ex presidente Alan García, en este momento internado en una clínica, es investigado por colusión agravada y lavado de activos por el caso de la Línea 1 del Metro de Lima obra que la constructora brasileña Odebrecht realizó durante su segundo gobierno (2006-2011).
Vale la pena recordar que el 20 de enero del 2017, Odebrecht reconoció a la fiscalía peruana que pagó US$8 millones en sobornos por la licitación del Metro de Lima.
Jorge Cuba, ex viceministro de Comunicaciones del segundo gobierno de Alan García, habría recibido US$2 millones y que Edwin Luyo Barrientos, ex miembro del comité de licitación, habría obtenido US$300 mil, según la tesis fiscal.
En ese momento Alan García expresó lo siguiente: “Son ratas como esas ensucian grandes obras que sirven al pueblo”. Enrique Cornejo, por su parte, señaló que “si hay algún sinvergüenza que ha recibido una coima que le caiga todo el peso de la ley”.
El proyecto del Metro de Lima fue gestado el 2009, durante el gobierno de Alan García. Pero la ejecución se acordó de una forma acelerada.
El 19 de febrero de ese año, García realizó un viaje a Cusco con el entonces ministro de Transportes, Enrique Cornejo, y el exrepresentante de la empresa Odebrecht en el Perú, Jorge Barata. La agenda presidencial solo preveía inaugurar un tramo de la carretera Interoceánica.
Encargo al MTC
Sin embargo, de regreso a Lima esa noche, García reunió de emergencia a sus ministros. Lo único que se discutió en esa sesión extraordinaria fue la aprobación de un decreto de urgencia que encargaba la obra del metro de Lima al Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).
El alcalde capitalino Luis Castañeda Lossio aprobó también ese mismo día un convenio con el MTC sobre la concesión del proyecto. Un día después de esta sesión del concejo municipal, Castañeda y el ministro aprista Enrique Cornejo firmaron dicho acuerdo de cooperación interinstitucional.
Todo este trámite se cerró oficialmente el 28 de febrero, con la publicación del Decreto de Urgencia 032-2009. A partir de ese momento, la ejecución del metro de Lima quedó solo en manos del MTC.
La participación de Odebrecht
En los meses siguientes, se publicaron otros cinco decretos supremos relacionados al proyecto. Todos ellos reforzaron las facultades del MTC sobre los recursos de la obra y restaron poder a las entidades fiscalizadoras como la Contraloría, el propio MTC y el Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositran).
El 23 de diciembre de 2009, el MTC y el Consorcio Tren Eléctrico Lima firmaron contrato con una inversión de 410 millones de dólares. Quienes integran este consorcio son la empresa brasileña Norberto Odebrecht S.A. y la peruana Graña y Montero.
Personaje clave. Oswaldo Plasencia Contreras era entonces director ejecutivo de la Autoridad Autónoma del Tren Eléctrico de Lima (AATE). Las disposiciones que emitió el gobierno permitieron a su oficina operar sin control fiscalizador. El informe de la Comisión Lava Jato del Congreso dice que "(se otorgó) una serie de prerrogativas en la ejecución del contrato sin necesidad de contar con el aval de la Contraloría General de la República, de Ositran y hasta del propio Ministerio de Transportes y Comunicaciones".
De acuerdo con El Comercio, Plasencia fue colaborador de Enrique Cornejo y, anteriormente, asesoró a García en el despacho presidencial por disposición de Provías Nacional. Según el informe de la Comisión Lava Jato, Plasencia habría tenido en la AATE "plenos poderes para aprobar adendas, adicionales de obras, expedientes técnicos definitivos sin necesidad de contar con la opinión de la Contraloría". Actualmente, una denuncia de la Contraloría pesa sobre él. Sin embargo, Plasencia niega las acusaciones.
Millonario perjuicio al Estado. El primer tramo de la línea 1 del metro de Lima fue inaugurado el 11 de julio de 2011. Este se extiende desde Villa El Salvador hasta la avenida Grau. Solo en ese tramo, la Contraloría detectó un perjuicio económico de 111 millones de dólares. El segundo tramo de la línea 1 que une a la avenida Grau con San Juan de Lurigancho tuvo una inversión de 583 millones. El contrato se inició el 28 de julio de 2011 y la obra fue inaugurada el 25 de julio de 2014.
La Comisión Lava Jato advierte en su informe en minoría que el costo final fue de 885 millones de dólares. También en esta obra se detectó perjuicio. Según este informe, perjudicó al Estado por 301 millones de dólares.
Acusados por presunta coima. Pero, ¿cómo es que Odebrecht obtuvo la licitación del metro de Lima? Según la Fiscalía de la Nación, la empresa constructora pagó cerca de un total 7 millones de dólares al expresidente del Comité de Licitación del Metro de Lima, Edwin Luyo, y al exviceministro de Comunicaciones, Jorge Cuba.
Edwin Luyo fue intervenido y detenido por la Policía el pasado viernes. Al día siguiente, la Fiscalía solicitó que Luyo pase 18 de meses de prisión preventiva, mientras se determina su responsabilidad en el caso de megacorrupción.
Jorge Cuba Hidalgo está prófugo. El mismo viernes, la Policía allanó su vivienda y no lo encontró. De momento, se cree que permanece en el extranjero desde diciembre. El ministro del Interior, Carlos Basombrío, adelantó que incluirán a Cuba en el programa nacional de recompensas.
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