El parlamentario dijo que como presidente de dicha comisión no votó por el archivamiento del documento, pero ello ocurrió porque seis de sus colegas, una mayoría, sí lo hizo.
El congresista Gustavo Rondón justificó el que la Comisión de Fiscalización, de la anterior legislatura parlamentaria y que él presidía, archivara el informe sobre indicios de corrupción y criminalidad en la región Áncash.
Sostuvo que si bien él no votó por el archivamiento del documento, ello ocurrió porque seis de sus colegas de dicho grupo de trabajo, una mayoría, sí lo hizo.
"Era un informe con delitos, incompatibilidades e irregularidades", comentó en RPP Noticias.
No obstante, dijo que probablemente los otros integrantes de la Comisión de Fiscalización apoyaron el archivamiento porque "muchos casos estaban en la Fiscalía y varios de ellos fueron archivados".
En su opinión ese proceder fue un error." Como presidente, indudablemente si uno hace un informe y la mayoría no lo aprueba es una decepción", sostuvo.
NO SE EXCULPÓ A CÉSAR ÁLVAREZ
Aclaró también que dicho documento no "exculpó" al presidente regional de Áncash, César Álvarez, sobre quien ahora pesa una orden de detención preventiva y se encuentra no habido.
Rondón cuestionó que el mencionado informe estuvo 10 meses en manos de la Mesa Directiva del Congreso de la República y recién en la víspera se dio la oportunidad de sustentarlo a su sucesor, Vicente Zeballos, actual presidente de la Comisión de Fiscalización.
Finalmente, apuntó que este documento ha pasado a poder de la nueva comisión especial que investiga las irregularidades en la gestión gubernamental en la región Áncash, a fin de que las investigaciones no partan de cero.
De otro lado, en su calidad de vocero del partido Solidaridad Nacional manifestó que su agrupación esperará las indagaciones a cargo de la Comisión de Ética y Fiscalización para determinar el destino del legislador Heriberto Benítez, quien podría ser separado de sus filas por su férrea defensa a Álvarez.
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