La vacancia del presidente implica cumplir con una larga lista de requisitos, entre ellos el voto de 87 de los 130 congresistas, indicó el especialista en derecho constitucional Samuel Abad.
Pedro Pablo Kuczynski vive su hora más difícil. Este miércoles, la comisión Lava Jato reveló que Odebrecht le pagó US$ 782 mil a Westfield Capital, su empresa unipersonal, por concepto de asesoría entre 2004 y 2007. Fueron siete pagos, cuatro de ellos efectuados durante su gestión como ministro de Gobierno del ahora prófugo Alejandro Toledo.
La mayoría de congresistas no está de acuerdo con que PPK continúe como presidente y han planteado su renuncia o vacancia.
El especialista en derecho constitucional Samuel Abad dijo a RPP que el problema central no es que Kuczynski haya prestado servicios de asesoría a la constructora brasileña, sino que lo hizo cuando ejercía un cargo de poder. “Según el artículo 126 de la Constitución Política del Perú, un Ministro de Estado no puede participar de actividades lucrativas. No puede, de ninguna manera, ser un lobista”.
Dos caminos
Según Abad, aunque el presidente de la República está blindado por ley, existe un mecanismo excepcional para retirarlo del cargo: la vacancia. Pero este pedido no es tan automático como se piensa, para vacar a un presidente no basta con tener la mayoría simple.
“Para ‘despedir’ al presidente, el Congreso se debe cumplir con una larga lista de requisitos. Primero, formular el pedido de vacancia con (al menos) el 20 por ciento del número legal de congresistas. Luego, sustentar las razones del pedido y presentar documentación que acredite estas razones. Con el pedido en agenda, el pleno debe decidir si lo admite o no. Para la admisión de vacancia se necesitan no menos del 40 por ciento de congresistas. Si esto se aprueba, se coordina una siguiente sesión y, si en esta sesión 87 de los 130 dan luz verde al pedido, tendremos nuevo presidente”, explicó.
La justificación de esta posible vacancia será, según lo expresado por la mayoría de congresistas, la de la incapacidad moral.
El otro camino es la renuncia. Según explica el abogado, si Pedro Pablo Kuczynski decide dimitir al cargo, deberá presentar una carta al Congreso. Si su renuncia es aprobada, el sucesor sería el primer vicepresidente, Martín Vizcarra, que se quedaría en el cargo hasta el 2021. “Es importante aclarar que el congreso está imposibilitado de exigirle a PPK que renuncie. Pero él puede decidir hacerlo si siente que la situación política es inviable”.
Diferencias y similitudes
Alberto Fujimori fue el tercer presidente vacado por incapacidad moral de la historia del Perú. Pero este caso, comparado con el de PPK, guarda más diferencias que similitudes.
“A diferencia de Kuczynski, Fujimori tenía varios motivos para ser vacado, como por ejemplo que salió del país sin permiso del Congreso, pero el sustento final fue su renuncia por fax. En esa época, la crisis política era tal, que sus sucesores se negaron a asumir el cargo y la responsabilidad recayó sobre Valentín Paniagua, el recién electo presidente del parlamento”.
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