El actor mexicano de 74 años le dirá adiós a su entrañable personaje. De sus planes para el retiro, conversó con RPP Noticias, mientras se alista para traer su popular circo por última vez al Perú.
A través de la línea telefónica, Carlos Villagrán se escucha jovial, lleno de energía, lúcido. No parece que tuviera 74 años. Interpretar a un niño de 8 años durante casi 50 años tiene sus ventajas, lo ha rejuvenecido; sin embargo, ya se dio cuenta que la energía no será eterna y ha llegado el momento de decirle adiós.
Pese a ser la quinta vez que se despide, esta vez es la definitiva. No habrán más regresos, ni más circos de Kiko en el Perú. Lo que se viene para Carlos es la vida de un adulto de 74 años que quiere estar tranquilo, en compañía de su familia, y administrando un negocio que le dé lo suficiente para vivir su vida de forma pacífica.
A poco de traer su espectáculo circense por última vez a nuestro país, Villagrán conversó con RPP Noticias sobre sus proyectos de jubilación, el cariño hacia un personaje que le dio tanto y su percepción del humor que se hace en estos tiempos.
Siempre vuelves con regularidad a Perú....
Perú es el país que más he visitado, me encanta, por su amabilidad, su comida, su gente. Me despedí una vez y me dijeron que vuelva al siguiente año. Entonces, me siento como en casa en Perú y en Lima.
Ya tuviste una gira de despedida antes, ¿ésta es la definitiva?
Si, me he despedido como cinco veces (risas). Pero éste si es definitivamente el último año. Después de Perú iré a Brasil para un Comic-Con y luego me retiro totalmente del ambiente artístico para vivir otro tipo de vida, una nueva vida o no sé cómo llamarlo.
Son casi 50 años de interpretar a 'Kiko', ¿alguna vez lo consideraste tu peor enemigo?
No, para nada. Me ha dado todo. Me ha dado la educación de mi hijo, me ha dado de comer, me ha dado satisfacciones, he hecho reir a mucha gente, no tengo patrón (jefe), escojo los trabajos que yo quiero. No tengo nada más que agradecerle, vivimos juntos Kiko y yo. Es el niño que traiga adentro, lo puedo exhortar, y a través de él... "pues hacer reir a todos mi cuates" (con voz de Kiko).
Fuera de los compromisos laborales con Kiko, ¿qué panorama se viene para Carlos Villagrán?
Tengo en proyecto ya retirarme y quedarme en México. En concreto tengo ─y no lo quiero hacer hasta no terminar mis compromisos con Kiko─ poner un restaurante llamado 'La vecindad de Kiko'. Voy a vestir a los meseros de Kiko, poner cantidad de cosas y recuerdos de la vecindad. Le voy a dedicar el 100% de mi tiempo a ese proyecto.
¿Ha sido agotador haber recorrido tantos países como Kiko en estos años?
No, yo me retiro aunque estoy bien de salud, y se lo agradezco a Dios. Tengo la bendición de tener salud y trabajo. No me aburro, me canso como cualquier otra persona. Cuando termine de hacer a Kiko estoy seguro que lo voy a extrañar.
Hay actores que han sufrido el encasillamiento de un personaje, ¿crees que Kiko ha sido una bendición o una maldición para ti?
No lo creo (que sea una maldición). Yo lo veo desde el lado positivo. Podría verlo como que me encasillé en el personaje, pero no. Pero si ya tengo antecedentes como Charles Chaplin o Mario Moreno 'Cantinflas' que traspasaron fronteras, pues yo con mi personaje me siento a gusto y me ha dado todo lo que te dije. Entonces yo lo veo desde ese punto de vista positivo.
El humor ahora ha migrado a redes sociales con los Youtubers ¿Qué piensas del humor de hoy en día?
El humor de estos tiempos es 'a cambio de'. Hemos cambiado tecnología por valores. Desde el año que yo nací hasta este año, ha pasado una generación que no se va a repetir. Jugábamos con canicas o inventábamos nuestros propios juguetes porque no teníamos aparatos electrónicos. Ahora, las redes sociales son hasta cierto punto exageramente peligrosas, más aún con los niños. Yo no estoy de acuerdo con el humor de las malas palabras, el sexo o la violencia. Yo prefiero más lo sano.
Eres gran devoto de la comida peruana, y ahora que hablas de tu restaurante, ¿has pensado incluir nuestra gastronomía?
Me imagino que sí. Tengo la visión de lo que es cocinar y lógicamente meteré cosas como el ceviche, que es lo más tradicional del Perú. Conchitas a la parmesana... papa a la huancaína que es un buen acompañamiento para cualquier comida.
Si llegara una propuesta más para volver con Kiko, ¿aceptarías?
Ya no creo que la acepte. Ya debo retirarme de esto y dejar en paz al personaje de Kiko. Juan Gabriel ya lo dijo en una canción: 'Dios perdona, pero el tiempo no'. Mi peor enemigo es un niño que sale en televisión y tiene 48 años menos que yo. Yo sigo teniendo vitalidad, pero quiero despedirme de la gente estando con mis cinco sentidos, siendo el Kiko dinámico que la gente merece. Ese es el motivo principal.
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