El estilo de vida puede marcar una decisiva influencia y, por tanto, el individuo tiene un papel muy importante en la prevención de enfermedades.
Practicar ejercicios regularmente, no fumar ni consumir alcohol, mantener un bajo índice de masa corporal y una dieta basada en vegetales y/o frutas, constituyen las cinco conductas saludables que evitan consecuencias graves en la salud de las personas, según la última publicación de la revista contra el cáncer elaborada por la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO).
Así lo dio a conocer el doctor Mauricio León Rivera, director médico del Centro Detector del Cáncer, quien explicó que las personas que aplican estos consejos en su vida diaria en comparación con los individuos que no lo practican pueden evitar diversas enfermedades crónicas con alta incidencia en nuestro país.
“De acuerdo a este estudio, adquirir las mencionadas conductas saludables, hace que las personas tengan una probabilidad de reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular hasta un 67%, de diabetes hasta el 73%, de cáncer hasta un 25%, evitar la demencia hasta 65%, y de todas las causas de mortalidad en general hasta en 32%”, indicó el experto.
En ese sentido, el galeno expresó que el estilo de vida puede marcar una decisiva influencia y, por tanto, el individuo tiene un papel muy importante en la prevención de enfermedades.
“Seguir fumando, bebiendo en exceso, sin hacer ejercicio y comiendo comida chatarra o muy grasosa, implica eludir la responsabilidad que supone proteger de modo inteligente nuestra salud”, remarcó.
“Las conductas de riesgo no solo ponen en peligro la salud y reducen la expectativa de vida de la persona, sino que como el costo económico es alto termina afectando a las personas, sus familias y la sociedad en su conjunto justificando la prioridad en la salud pública”, añadió.
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