La vitamina C ayuda a reforzar nuestro sistema inmunológico, mantiene el buen funcionamiento de los pulmones y contribuye a la menor duración del proceso de resfrío común. La mandarina, especialmente, es una de las mejores alternativas.
Ante la aparición del nuevo coronavirus COVID-19, es esencial respetar todas las medidas de prevención establecidas tanto por el Gobierno como por la Organización Mundial de la Salud.
Además de lavarnos las manos frecuentemente, cubrirnos al toser o estornudar y desinfectar las superficies y objetos comunes del hogar, también podemos reforzar nuestro sistema inmunológico desde casa. Para hacerlo, es clave el consumo de alimentos ricos en vitamina C, como los cítricos, dentro de los que destacan la mandarina, la naranja, el limón o la toronja.
El Ministerio de Salud resalta que existe un estrecho vínculo entre la función respiratoria y la nutrición, pues la defensa pulmonar depende, entre otras cosas, del sistema inmunológico. Por esta razón, para mantener saludable y fortalecer nuestro sistema respiratorio, es importante incluir a la alimentación no solo alimentos ricos en vitamina C, sino también en Vitamina A, E, y ricos en minerales como el Zinc, Cobre, Selenio y Hierro.
Mandarina: La fruta ideal para adquirir vitamina C
De acuerdo con la Asociación de Productores de Cítricos del Perú (Procitrus), la vitamina C se pierde con facilidad al estar expuesta a la luz o al calor. Por esta razón, la mandarina es una de las frutas ideales para obtenerla ya que, gracias a la protección de su cáscara y a la película delgada (rica en fibra) que recubre al fruto, permite aprovecharla en su totalidad.
El consumo frecuente de esta fruta en el desayuno o como merienda de media mañana o tarde, puede contribuir con la prevención y la menor duración del proceso de resfrío común. Además, su poder antioxidante también actúa como prevención de enfermedades del tipo degenerativo.
Según Procitrus, una mandarina puede pesar entre 50 y 100 gramos y debido a su bajo aporte de calorías puede consumirse dos o tres unidades en el día para cubrir las necesidades de vitamina C en los diferentes grupos de edad.
Así evitaremos la deficiencia nutricional y, consecuentemente, problemas de salud. De hecho, algunos signos o síntomas de la deficiencia de vitamina C son la anemia, sangrado nasal y de encías, cabello y piel seca, dolor e inflamación articular.
Comparte esta noticia