Tras varios días de rumores de embarazo, la duquesa de Sussex ─según medios ingleses─ habría decidido no salir embarazada tan rápido por motivos de salud.
En las últimas semanas abundaron las noticias sobre un posible embarazo de Meghan Markle, quien hace solo un par de meses se casó con el príncipe Harry. Algunos medios, incluso, aseguraron que la duquesa de Sussex inició la dulce espera al mismo tiempo que su concuñada Kate Middleton.
La realidad, sin embargo, es distinta. De acuerdo con medios ingleses, Meghan Markle habría dedicido no convertirse en madre de inmediato por una razón muy simple, que tiene que ver con su agenda de actividades de las próximas semanas y, por supuesto, su estado de salud.
Meghan Markle estaría aplanzando su embarazo por una sencilla razón: en octubre próximo realizará, junto con el príncipe Harry, su primera gira real a Australia, Fiji, Tonga y Nueva Zelanda. La duquesa quiere evitar viajar sufriendo los síntomas del embarazo.
El Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS por sus siglas en inglés) asegura que no hay problemas en viajar embarazada, pero advierte acerca de los síntomas que se pueden sufrir y la dificultad de hacerlo durante las primeras 12 semanas debido a las náuseas y el cansancio.
Además, de acuerdo con el NHS, el riesgo de pérdida es elevado durante los primeros tres meses.
ANTECEDENTES EN LA FAMILIA REAL
Kate Middleton, quien está casada con William de Cambridge ─hermano de Harry─, esperó hasta los 7 meses después de su primer aniversario de boda para anunciar su embarazo, en diciembre de 2013.
Kate y William fueron los primeros futuros monarcas en 200 años en no concebir durante el primer año de matrimonio. La razón para demorarse un poco tendrían que ver con el compromiso que tiene William con su abuena, la reina, y sus deberes como futuro mocarca del Reino Unido.
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