Necesitando un gol más para clasificar, Maurizio Sarri arriesgó enviando al campo a Paulo Dybala, pero la 'Joya' se lesionó a los pocos minutos.
Juventus llegaba al partido contra Lyon por la vuelta de octavos de final de la Champions League con la incertidumbre por poder contar con Paulo Dybala.
La ‘Joya’, elegido el MVP de la Serie A, sufrió un problema muscular el pasado 26 de julio en el cotejo contra Sampdoria y desde ahí estuvo sentido.
Maurizio Sarri necesitaba de él, para completar la ofensiva con Cristiano Ronaldo, por ello, el técnico lo convocó pese a que sabí no estaba al 100%.
2-1 ganaba Juventus en el segundo tiempo y le hacía falta un gol más para meterse a cuartos de final. Con el reloj avanzando, Sarri se la jugó y envió al campo al crack argentino.
Paulo Dybala entró en lugar de Federico Bernardeschi, pero no pudo tener contacto con muchas pelotas. Apenas dio seis pases e intentó una gambeta. Desde un primer momento se mostraba incómodo. Luego de un remate que se fue elevado comenzó a renguear.
El delantero había mostrado sus ganas por colaborar con su equipo, pero no pudo seguir. A falta de siete minutos para el final, tomó la pelota e intentó encarar a un rival. Sin embargo, automáticamente frenó la acción y la tiró por un costado.
Consolado por compañeros y rivales salió del campo de juego y en su lugar ingresó Marco Olivieri. El resultado no se movió más, quedándose fuera de la Champions League otra vez Juventus y perdiendo por el momento a la ‘Joya’.
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