El equipo peruano dirigido por Nolberto Solano tan solo logró un empate en la fase de grupos de la Juegos Panamericanos. Aquí un análisis del desempeño de la bicolor en Lima 2019.
Imperceptible funcionamiento colectivo, pobres rendimientos individuales y un técnico que evidenció los errores de su equipo a través de sus decisiones. Así, por muy local que seas, se vuelve muy difícil siquiera tentar la chance de conseguir pelear una medalla hasta instancias finales.
“No quiero poner excusas, pero hubo poco tiempo de trabajo”, fue lo primero que dijo Nolberto Solano tras quedar eliminado de los Juegos Panamericanos Lima 2019. Sí, hubo poco tiempo de trabajo, por decisión o necesidad del mismo comando técnico, que estuvo con la selección mayor en la Copa América de Brasil.
Perú fue un equipo previsible en ataque. Con dos extremos que siempre buscaron, sin fortuna, que Mauricio Montes culminara los desbordes generados, casi siempre con inferioridad numérica. En la zona defensiva, el medio fue una zona de tránsito libre que dejó expuesta la lentitud de los centrales y el desorden de los laterales.
De los tres jugadores libres escogidos por Solano, solo Carlos Cáceda mostró nivel distinto en los tres partidos, tapando horrores defensivos. Como ante Uruguay, que evitó la goleada atajando un penal en los descuentos. Lo de Yamir Oliva fue intermitente. Tuvo chispazos con Honduras, pero estuvo poco participativo en el primer y tercer juego. Finalmente, Mauricio Montes aportó muy poco. Más allá de sus ganas y solidaridad para ser el primero en presionar la salida del rival, su aporte ofensivo fue ínfimo.
Y Nolberto Solano, lejos de potenciar su plantel, se equivocó mucho para ser un torneo tan corto. La conformación del plantel pareció desequilibrada: solo un lateral que habitualmente se desempeña desde siempre en esa posición (Rabanal) y hasta cuatro extremos. Insistencias sin resultado, como usar a Aldair Fuentes de central, cuando en Alianza Lima se ha consolidado en la primera línea de volantes.
Duele quedarse sin medalla, preocupa la imagen, da temor lo que pueda pasar el próximo año en el Preolímpico.
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