Entre risas, cantos y bailes, los residentes de los asilos San Vicente de Paul y Canevaro fueron festejados por el día del padre.
Por el día del padre, los residentes de los asilos San Vicente de Paul, en Barrios Altos, y Canevaro en el Rímac, adelantaron los festejos y al ritmo de diversos estilos musicales, mostraron que no han perdido la alegría de antaño y que aún disfrutan el día a día de sus vidas.
Estos festejos fueron aprovechados para premiar a los ganadores de los concursos de baile, canto, chistes, entre otros, que se realizaron durante la semana por la Sociedad de Beneficencia de Lima Metropolitana.
Entre todas estas alegres personas, conocimos el caso de José Jaramillo, de 76 años, quien lleva más de un año en el recinto de Barrios Altos alejado de su familia, luego de sufrir un derrame cerebral que lo dejó postrado en una silla.
Jorge Bravo es otro residente, y cerca de 3 años ninguno de sus 2 hijos se ha acercado a visitarlo, él nos comenta, que no sabe nada sobre el paradero de ellos, luego que la madre de los menores se los llevara a Huánuco.
Estos son tan solo algunos de los casos de residentes de estos asilos, quienes han sido olvidados por sus familias, sin embargo, guardan esperanzas en sus corazones de que algún día puedan volver a ver a sus seres queridos.
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