De no ocurrir ningún contratiempo, el grupo de diez rehenes será liberado tras 13 años de cautivero.
Los helicópteros y la misión humanitaria que recogerán este lunes al primer grupo de diez rehenes que las FARC prometieron liberar llegaron hoy procedentes de Brasil a la ciudad colombiana de Villavicencio, en donde ultiman el operativo.
Si las condiciones climáticas lo permiten, las aeronaves saldrán a primera hora de la mañana del lunes hacia algún lugar de la selva para recoger al último grupo de policías y militares en poder de esa guerrilla y los que más tiempo llevan privados de la libertad, con más de trece años de cautiverio.
Para que el operativo cuente con todas las garantías, los mecánicos de las Fuerzas Armadas de Brasil que prestarán la ayuda logística a Colombia se dedicaron durante la tarde de hoy a revisar el funcionamiento de los dos helicópteros Cougar 532UE en el aeropuerto de Villavicencio.
La portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), María Cristina Rivera, explicó hoy a Efe que los delegados de ese organismo afinan también los detalles, lo mismo que la organización Colombianos y Colombianas por la Paz (CCP), que lidera la exsenadora Piedad Córdoba.
Todos ellos llegaron con las aeronaves del municipio brasileño de Sao Gabriel da Cachoeira, donde ayer verificaron que los helicópteros tuvieran impresos los emblemas de la Cruz Roja, que indican que a bordo van los responsables de una misión humanitaria.
Villavicencio, capital del céntrico departamento del Meta, es ya un hervidero de familiares de secuestrados; exrehenes, entre ellos el gobernador de ese departamento, Alan Jara, quien pasó ocho años -15 de julio de 2001 al 3 de febrero de 2009- en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), así como medios colombianos e internacionales.
Una eucaristía en la catedral de Nuestra Señora del Carmen reunió a los familiares para pedir por el regreso sin contratiempos de sus seres queridos.
Los secuestrados que encontrarían la libertad a partir de este lunes son los militares Luis Alfonso Beltrán Franco, Luis Arturo Arcia, Robinson Salcedo Guarín y Luis Alfredo Moreno Chagüeza, además de los policías Carlos José Duarte, César Augusto Lasso Monsalve, Jorge Trujillo Solarte, Jorge Humberto Romero, José Libardo Forero y Wilson Rojas Medina.
Todos ellos fueron secuestrados en tomas masivas de rehenes llevadas a cabo por las FARC entre 1998 y 1999, por lo que reducir el impacto del reencuentro tanto para los uniformados como para las familias es una prioridad de los garantes, de lo que velará in situ un equipo psicológico del Ministerio de Defensa.
Rivera reveló que el CICR ha visitado a cada una de las familias para recolectar fotos recientes que los delegados de la misión mostrarán a los uniformados una vez que hayan sido entregados por la guerrilla y estén en el helicóptero de camino a Villavicencio.
Una vez liberados, los uniformados se encontrarán con sus familiares y con testigos de excepción: un grupo internacional de mujeres encabezado por la líder indígena guatemalteca Rigoberta Menchú, premio Nobel de la Paz en 1992 y premio Príncipe de Asturias en 1998.
"Nuestra delegación es una delegación de distinguidas personalidades, personas que han luchado durante muchísimos años, que hemos vivido en carne propia los conflictos internos y venimos aquí a acompañar" el proceso, dijo hoy Menchú en Bogotá, antes de viajar a Villavicencio.
Junto con Menchú están Margarita Zapata, nieta del revolucionario mexicano Emiliano Zapata; y Xiomara Castro, esposa del expresidente hondureño Manuel Zelaya, entre otras.
También desde las 18.00 hora local (23.00 GMT) de hoy, y hasta las 06.00 hora local del 3 de abril (11.00 GMT de ese día), quedaron suspendidas las operaciones militares en la zona de la entrega para la primera fase de las liberaciones, tal y como establecen los protocolos de seguridad acordados entre el CICR y el Ministerio de Defensa.
A las 6 de la tarde del martes, día 3, volverán a cancelarse los sobrevuelos para facilitar la segunda fase del operativo, que si el clima lo permite, habrá terminado el miércoles 4 de abril con los diez uniformados reunidos con sus familias.
Con este proceso de liberaciones se pondrá fin en Colombia al secuestro con fines políticos, pues las FARC anunciaron en febrero pasado su decisión de no volver a hacer uso de este delito de lesa humanidad como arma de guerra y financiación.
EFE
Comparte esta noticia