'Caracol' fue sentenciado por los delitos de asociación ilícita, sicariato, homicidio calificado, extorsión agravada, tenencia ilegal de armas y tráfico ilícito de drogas.
El Poder Judicial condenó a 35 años de cárcel a Gerson Gálvez Calle, alías 'Caracol', por el caso 'Barrio King', como se denominaba la banda criminal que lideraba el ahora sentenciado.
La condena fue dictada por el Juzgado Penal Corporativo Especializado en Crimen Organizado y Corrupción en una audiencia realizada este miércoles.
Gersón Gálvez Calle era procesado junto con otras 33 personas, también integrantes de 'Barrio King'. Ellos eran acusados por los delitos de asociación ilícita, sicariato, homicidio calificado, extorsión agravada, tenencia ilegal de armas y tráfico ilícito de drogas.
Según la acusación de la fiscalía, Gálvez dirigía una red encargada de enviar droga al extranjero mediante "burriers", a pesar de que estuvo recluido en el penal del Callao hasta octubre de 2014.
'Caracol' había sido sentenciado a 15 años de prisión en octubre de 2003, cuando tenía 21 años, por los delitos de homicidio en grado de tentativa y tenencia ilegal de armas, pero en 2014 salió en libertad gracias a una "redención de pena" por su trabajo en prisión.
Dos años después, el 30 de arbil de 2016, fue capturado en la ciudad de Medellín, Colombia, cuando era considerado el delincuente más buscado del país. 'Caracol´habia fugado del país luego de que la Policía desbaratara a la temible banda 'Barrio King' en noviembre de 2015.
Según un reportaje de Cuarto Poder, esta banda era todo un aparato criminal con ramificaciones enquistadas en las altas esferas políticas, policiales y judiciales del Callao.
Gersón 'Caracol' Gálvez, el líder de la banda
“Barrio King” tenía la hegemonía absoluta del cobro de cupos, extorsión, coacción y sicariato en el primer puerto, y era dirigida por Gerson Gálvez Calle.
En abril de 2016, el entonces jefe de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (Dirincri), José Luis Lavalle, indicó que la banda había tomado control de ciertas actividades del puerto para fines ilícito de tráfico de estupefacientes y estaba a punto de convertirse en un verdadero cártel de la droga.
La pista que llevó a Barrio King fue seguida por la División de Investigación de Robos y Extorsión de la Dirincri desde mediados de 2015, cuando ingresó al Callao para investigar las constantes muertes de estibadores: tenían en lista a más de 27 de estos trabajadores del puerto asesinados por encargo.
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