La justicia peruana señaló que el animal estuvo en el Parque de las Leyendas sin que se evaluara su posible reinserción a su hábitat natural.
El Tercer Juzgado Especializado en lo Constitucional de la Corte Superior de Justicia de Lima declaró este martes fundada en parte la demanda contra el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) por la vulneración de los derechos del zorro Run Run.
Esta demanda fue presentada por el Instituto Peruano de Asesoría Legal del Medio Ambiente y Biodiversidad donde señalaban que Serfor mantuvo en cautiverio al animal en el Parque de las Leyendas tras ser rescatado en Comas.
Se le ordena al Serfor crear, en un plazo no menor de 30 días hábiles, un protocolo específico; reevaluar el estatus actual del zorro Run Run a fin de considerar si es factible de reinserción a su hábitat natural u otro similar que posibilite su libre desarrollo.
El fallo judicial también exhorta a dicha entidad a aumentar sus esfuerzos de fiscalización y sanción a fin de evitar que situaciones similares vuelvan a repetirse, además debe incentivar campañas de educación para sensibilizar a la población respecto de la adquisición, compra y tratamiento de animales silvestres, procurando que los mismos no sean extraídos de su hábitat natural.
La demanda también incluía a la Municipalidad de Lima por haber puesto al animal en cuarentena, supuestamente generando sufrimiento innecesario al zorro. Sin embargo, para la justicia peruana no existe prueba suficiente para determinar ello, sino que esta medida constituyó una medida extraordinaria para realizar los exámenes médicos necesarios e identificar el tratamiento adecuado.
La historia de Run Run
El zorro andino 'Run Run' fue una de las noticias más destacadas del 2021. El animal fue buscado por personal de Serfor durante seis días en Comas ya que una familia lo compró porque pensaron que era un perro.
Fuentes de la institución detallaron que el animal fue atrapado tras caer bajo el efecto de los dardos tranquilizantes que le lanzaron. Luego fue puesto en observación de los especialistas a la espera de que se determine a qué zoológico será trasladado.
El zorrito andino fue capturado luego de días de estar deambulando por el Asentamiento Humano Sol Naciente. El personal del servicio forestal se había desplegado en la zona con el fin de identificar su recorrido.
El personal tuvo que sacarse los uniformes y vestirse como vecinos comunes y corrientes porque el zorro andino lograba identificarlos y escapaba. Además, despejaron toda la zona de cualquier vecino que trate de acercarse, ya que algunos lo espantaban con piedras.
Su historia traspasó las fronteras y fue relatada en diversos medios internacionales.
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