En Ampliación de Noticias, el presidente de Aprosec hizo un análisis sobre la lucha contra la criminalidad, que día a día cobra víctimas en el país.
Seguridad
Advierten falta de estrategias para hacer frente a una delincuencia cada vez más “violenta”
César Ortiz Anderson, presidente de la Asociación Pro Seguridad Ciudadana (Aprosec), advirtió una falta de estrategias para hacer frente a una delincuencia cada vez más violenta, que no duda en acabar con la vida de sus víctimas, tal como ocurrió en vísperas de Navidad en un mall de la ciudad de Trujillo.
“La delincuencia de hoy no tiene escrúpulos, es muy violenta. A la delincuencia no le interesa que haya personas, mujeres, niños, embarazadas. (...) Sin ser la victima elegida, uno puede salir malherido o muerto en una balacera”, comentó en Ampliación de Noticias.
En ese sentido, advirtió que se deben tomar acciones puntuales, ya que estas bandas organizadas -dijo- no tienen escrúpulos, al punto de realizar sus delitos a plena luz del día, sin importarles la presencia o no se cámaras de seguridad.
“Faltan planes, estrategias, diseños que sean coherentes, que realmente se trabaje articuladamente. Eso no está habiendo. Quisiera saber quiénes son los que asesoran al Ministerio del Interior, porque lo que están haciendo es proponer, pero nada operativo. Todo es declarativo”, reflexionó.
Al respecto, dijo que el Serenazgo distrital debe ser “preventivo”, ya que su función no es enfrentar el delito. “Los serenos no pueden enfrentar al sicariato, a los secuestradores, a la delincuencia armada, pero sí preventivamente están trabajando”, apuntó.
“Hay personas que piensan que los serenos los van a salvar de un secuestro. No es así, debe ser la Policía la que enfrente el delito”, agregó.
Robo de celulares
En otro momento, el representante de Aprosec advirtió que los robos de celulares no solo se realizan por el valor del aparato, sino porque actualmente los ciudadanos tienen sus aplicativos de banca instalados en ellos.
Como experiencia personal, refirió que, por prevención, posee dos celulares: uno con los aplicativos de bancos “que está en casa, que nunca saco”; y otro para recibir llamadas y comunicarse vía aplicativos de mensajería.
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