La ministra Ana María Mendieta comentó que su sector fue al lugar del incendio ayer por la noche para constatar el estado de los afectados y que hoy fueron a entregar víveres. Agregó que están coordinando con Indeci y el Ministerio de Vivienda para garantizar que no vuelvan a dormir en la calle.
La ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Ana María Mendieta, anunció este domingo que su portafolio está realizando las coordinaciones necesarias para la entrega de carpas a las familias afectadas por el incendio que consumió varios pisos de la cooperativa Santa Elisa en Cercado de Lima.
En declaraciones a RPP, la titular del sector Mujer comentó que ya coordinó con el Ministerio de Vivienda y con Indeci para garantizar la entrega de agua y las carpas a los afectados a fin de evitar que duerman nuevamente en las calles.
“Hemos coordinado con el Ministerio de Vivienda justamente para solucionar el problema del agua y hemos coordinado con Indeci, quien también ha acudido con alimentación y estamos coordinando con ellos justamente para ver el tema de las carpas para que pernocten en la vía pública”.
Coordinaciones adicionales
Agregó también que han estado entregando víveres y que ese está realizando la evaluación de la estructura para ver si existe posibilidad de que las familias puedan regresar. Sin embargo, precisó que esto es competencia del Indeci.
“Se está haciendo una evaluación de la estructura del edificio justamente para ver la posibilidad de si van a poder regresar o no eso está en manos de defensa nacional y del Indeci. Justamente para poder ver la situación en que van a quedar las víctimas estamos apoyándolos desde el primer momento para poder cambiar esta situación difícil que están pasando”, agregó.
Afectados por incendio
Alrededor de 100 familias que vivían en el edificio tuvieron que evacuar inmediatamente cuando comenzó el fuego, por lo que no pudieron sacar dinero ni los implementos necesarios para pasar la noche.
Muchas familias aún permanecen en la vereda contigua a la edificación. Incluso, niños y adultos mayores debieron dormir en colchones y cartones.
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