Áreas verdes se han perdido debido a la deuda que mantiene la Municipalidad Provincial de Trujillo con Sedalib, la cual asciende a 10 millones de soles.
Secos, amarillos y sin vida. Así lucen al menos 30 parques de los 360 que existen en la ciudad de Trujillo, los cuales no son regados desde hace meses debido al desabastecimiento de agua.
Lugares de recreación, en donde antes familias podían pasar un rato al aire libre, tienen la grama seca y tierra en lugar del verdor que antes los caracterizaban. Un claro ejemplo es el parque ubicado en la urbanización El Sol. Los árboles están resecos hasta el punto en que se notan las raíces, mientras que el césped es inexistente.
Los vecinos aseguran que pese a que solicitaron el riego y resembrado de las áreas verdes, a través de una comitiva, el pedido no es atendido.
La Subgerencia de Áreas Verdes del Servicio de Gestión Ambiental de Trujillo señalaron que hace tres meses, los puntos de agua de los parques fueron cerrados por la deuda que mantiene la institución con Sedalib.
Vecinos organizados
Si bien la falta de agua ha originado el abandono de los parques, hay vecinos que se organizaron para rescatar sus lugares de esparcimiento como en la urbanización Daniel Hoyle.
La alcaldesa Carolina Romero explicó que, aprovechando la existencia de un pozo, los moradores hicieron una colecta y compraron una manguera de 100 metros. Indicó que luego de un mes con riego diurno y nocturno, todos los días, el parque pudo volver a la vida.
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