En su segundo día de huelga, los obreros de la municipalidad provincial de Chiclayo marcharon con un ataúd negro con la fotografía del alcalde Marcos Gasco. Pes ea ello, el burgomaestre reiteró que no dará marcha atrás en su decisión de anular los pactos colectivos.
Debido a la huelga de los obreros municipales de Chiclayo, el alcalde Marcos Gasco Arrobas, pidió ayuda a la Séptima Brigada de Infantería del Ejército de Lambayeque, entidad que dispuso que 150 soldados realicen trabajos de limpieza en las diferentes calles del centro de la ciudad. Sin embargo, un grupo de trabajadores no dejó que se realicen estas tareas.
Desde muy temprano los soldados provistos de cascos, guantes, mascarillas y escobas, dejaron su cuartel y se trasladaron a las calles céntricas de la ciudad y mientras algunos ya barrían, llegó un Superior y les ordenó dejar de realizar el trabajo.
Según se conoció, los obreros habrían amenazado a los soldados, y estos, a fin de evitar alguna confrontación, optaron por dejar las escobas y subir a sus cargatropas para retornar a su cuartel.
Queman ataúd
En tanto, los obreros municipales en su segundo día de paralización, se movilizaron por las calles céntricas de la ciudad cargando un ataúd negro en el que habían colocado una fotografía del alcalde Marcos Gasco Arrobas, el cual quemaron en el frontis de la exmutual, local donde funcionan las oficinas administrativas de la comuna.
Convenio
Asimismo se supo que la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCh) y el Gobierno Regional de Lambayeque (GORE), firmaron un convenio que estipula que, por un lapso de 15 días, la entidad regional ayudará en el recojo de basura. Es así que se dispuso que 8 volquetes y 2 cargadores frontales del Gobierno realicen el recojo de basura en la “Ciudad de la Amistad”.
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