El parlamentario de la bancada Honor y Democracia indicó en RPP que la sentencia consentida a Gino Ríos debió impedirle ser elegido en el cargo. En esa línea, dijo que el defensor del Pueblo, Josué Gutiérrez, podría ser objeto de una denuncia constitucional, pues fue el presidente de la comisión encargada de escoger a los miembros de la JNJ.
Héctor Acuña, parlamentario de Honor y Democracia, consideró que están claros los motivos para la vacancia de Gino Ríos, presidente de la Junta Nacional de Justicia (JNJ), luego de que se revelara que cuenta con una sentencia consentida por violencia familiar.
En declaraciones a Las cosas como son de RPP, el parlamentario dijo que la sentencia consentida por violencia familiar de Ríos le debió impedir ser elegido en el cargo, pues el artículo 11 de la Ley de la JNJ así lo dispone.
“Lo que bien claro establece el artículo 11 es que no pueden postular o acceder a estos cargos, los sentenciados y en su artículo D, si no me equivoco, por violencia familiar, que tengan sentencia consentida”, dijo.
En esa línea, el parlamentario indicó que es necesario ahora ver qué ocurrió en el proceso de elección que terminó con Ríos como presidente de la JNJ. Para ello apuntó hacia la comisión especial que se encargó de evaluar y elegir a los miembros de dicho órgano constitucional, que estuvo presidida por el defensor del Pueblo, Josué Gutiérrez.
“Creo que nos falta el trabajo siguiente, cómo es posible que a los señores, el defensor del Pueblo, otros, que evaluaron se les haya pasado la tortuga por decir. Entonces por ahí creo que hay un tema pendiente de una denuncia constitucional”, sostuvo.
El caso
En vísperas, el dominical Cuarto Poder difundió que Gino Ríos cuenta con una sentencia por violencia familiar en agravio de su exesposa, la cual fue emitida en mayo de 2011 por el Primer Juzgado Transitorio Especializado de Familia de La Molina y Cieneguilla.
La sentencia determinó la existencia de violencia familiar en la modalidad de maltrato psicológico ejercida por Ríos Patio contra su exesposa, de quien se divorció hace 14 años. Ríos no apeló y aceptó el fallo.
Esta sentencia no fue centro de debate ni cuestionamientos durante la etapa de entrevistas a los postulantes de la JNJ. Al respecto, el defensor del Pueblo, Josué Gutiérrez, que presidió la comisión especial para elegir a los miembros de la JNJ, dijo que “por decoro” no se enfatizó en temas que podrían afecta a “terceros”, como niños o la exesposa da Ríos.
“Ese tipo de sentencias, que tiene que ver no con maltratos físicos, no con violencia física, sino con la imputación de un tema estrictamente psicológico. No lo minimizo, pero no hay una sentencia que pueda significar de manera condenatoria con un hecho que quizá tiene una connotación punible (…) La comisión no ha querido ser invasiva en ese terreno de lo estrictamente familiar”, dijo.